por Alejandro Lafourcade
Durante el viaje realizado la semana anterior que lo tuvo como principal protagonista, el intendente Humberto Zúccaro estuvo en la ciudad española de Málaga para cerrar acuerdos e incorporar conceptos de su Parque Tecnológico.
Sin embargo, el itinerario también incluyó la posibilidad de conocer en profundidad el funcionamiento de la Policía Local, equivalente –con sus diferencias y semejanzas- al Servicio de Apoyo Policial (SAP) que actualmente patrulla por Pilar. No obstante, también fue un paso más en la búsqueda de la creación de una tasa de seguridad, impuesto que se sumaría el año próximo a los ya existentes.
Málaga es la ciudad cabecera de la provincia del mismo nombre, parte a su vez de la Comunidad Autónoma de Andalucía. Tiene una superficie de 395 km², prácticamente idéntica a la de Pilar. Según datos de 2011, su población es de 568.000 habitantes (casi el doble que nuestro distrito de acuerdo al censo 2011).
“Es una ciudad muy tranquila”, expresó a El Diario Juan Cano, periodista del diario Sur, uno de los más importantes de la zona y experto en el tema. “El delito más recurrente en Málaga es el hurto en la vía pública o en tiendas, con algo más del 30%”, agrega. Sin embargo, los informes públicos indican que el año anterior la memoria se cerró en 340 vehículos (entre patrulleros, utilitarios camionetas, motos y hasta un camión) y 937 recursos humanos; de los cuales 816 son policías.
El hombre indicó que la policía local “se ocupa de la regulación del tráfico y la seguridad ciudadana; y su presencia ocupa la mayoría de los diez distritos de la ciudad”. A su vez, recordó que “hace unos meses atrás se hizo una remodelación importante en el cuerpo: se creó un Grupo Operativo de Apoyo y se decidió una mayor presencia en espacios públicos –como las plazas- para recuperarlos, aspirando a que vuelvan a ser sitios para toda la familia, y no posibles focos de delincuencia. También se crearon una Unidad de Bicicletas (los bicipolicías) y un espacio para la resolución de conflictos vecinales (mediación comunitaria)”.
No obstante, consultado sobre el grado de conformidad que tienen los vecinos hacia la fuerza, expresó: “Me reservo hablar sobre la opinión que la población tiene acerca de la labor de la policía local, ya que según quién sea el consultado, esta puede variar”.
Además, cuando se le preguntó si en la ciudad andaluza se cobraba alguna tasa de seguridad, Cano pareció sorprendido al señalar que “no, aquí no se cobra ningún impuesto especial” para el mantenimiento de esta policía.
Organizados
La Policía Local de Málaga tiene una gran diferencia con respecto a la estructura de prevención ciudadana existente en Pilar: sus efectivos pueden portar armas (revólveres y pistolas), algo que aquí siempre ha estado rechazado de plano.
Sus funciones son ordenar, señalizar y dirigir el tráfico en el casco urbano; intervenir en casos de accidentes de tránsito; oficiar de Policía Administrativa (en lo relativo a las Ordenanzas y demás disposiciones municipales dentro del ámbito de su competencia); participar en las funciones de Policía Judicial, en la forma establecida en la Ley; prestar auxilio en aquellos casos de accidentes, catástrofes o calamidades públicas (sic), participando de la protección civil.
A su vez, se ocupa de efectuar diligencias de prevención y actuaciones que tiendan a evitar la concreción de actos delictivos; así como de vigilar los espacios públicos y “colaborar con las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado y con la Policía de las Comunidades Autónomas en la protección de las manifestaciones y el mantenimiento del orden en grandes concentraciones humanas cuando sean requeridos para ello”. Además, como indicaba Cano, coopera en la resolución de los conflictos privados de orden vecinal.
En cuanto a su organización, la Policía Local está dividida en tres grupos de servicios subordinados: Servicio Unidades Centralizadas, Servicio de Policía de Barrio y Servicio de Gestión Técnico-Administrativa.
El intendente Zúccaro acaba de bajarse del avión que lo traía de Málaga (regresó el fin de semana). Para ver si en Pilar se aplicarán algunas de las particularidades del modelo policial malagueño, sólo habrá que esperar.
Queremos ser más
En 2010, policías y bomberos de Málaga se manifestaron frente al Ayuntamiento con un pedido al menos llamativo mirado con ojos argentinos: ellos mismos exigían la incorporación de más efectivos, bajo el lema “Alcalde escúchanos. Nosotros somos tu personal de confianza”.
