Servicio de emergencias
Servicio de emergencias
Aunque el Tedeum empezó casi puntual, el último 25 de mayo, la parroquia Nuestra Señora del Pilar ya estaba repleta desde un tiempo antes. Y los primeros en llegar fueron los alumnos de escuelas que portaban con orgullo las banderas nacional y bonaerense.
Incluso los más chiquitos, del preescolar, debieron esperar de pie un buen rato en medio de una importante aglomeración. Así fue que, sucesivamente una nena y un nene se descompusieron y debieron ser llevados hasta el puesto sanitario instalado en la esquina de la parroquia. Eso sí: la atención de emergencia estuvo a cargo del propio intendente Humberto Zúccaro y del director del Hospital Sanguinetti, Gustavo Niotti.
Dame una señal
Promediaba la homilía que monseñor Oscar Sarlinga dio en Pilar con motivo del Bicentenerario cuando de pronto sucedió: la luz del templo se apagó y los parlantes dejaron de transmitir las palabras del obispo, que fue oído desde entonces sólo por los que ocupaban los bancos más cercanos al púlpito.
Entre los presentes no fueron pocos los que cruzaron miradas recriminatorias, como culpándose mutuamente por haber desatado con su presencia en un lugar sagrado las iras sobrenaturales.
Igual, parece que el apagón se debió a causas más terrenales y a los pocos minutos se restableció el suministro eléctrico.
Prioridades
Algunas quejas se escucharon contra los organizadores del desfile local por el Bicentenario. Sobre todo, salieron de boca de los padres de los más chiquitos que debieron esperar un buen rato a que pasaran los adultos de diversas instituciones. Principalmente, las nenas vestidas con sus ropas de danzas árabes quienes desfilaron cuando el sol hacía rato que había dejado de calentar.
Ceniceros
“¿Acá se respeta la ley provincial, o me tengo que ir?, lanzó el concejal Miguel Saric en su habitual tono imperativo. Del otro lado de la mesa, el jefe de la policía provincial, Juan Carlos Paggi, lo miraba atónito. “Es que acá hay ceniceros, aunque está prohibido fumar. Si alguien prende un cigarrillo, yo me levanto y me voy”, insistió el edil.
Paggi, anfitrión de la reunión de seguridad en la que Saric representó al intendente Humberto Zúccaro, mandó rápidamente a retirar los ceniceros en un gesto que permitió que el encuentro no se malograse.
Investigación
No gana para disgustos el médico y funcionario part time Omar Mantovani. Cuando todavía festejaba la recuperación de obras de arte por 4,5 millones de dólares que le habían robado en noviembre último, otra mala nueva golpeó a su puerta. Según informa en su última edición la revista Noticias, la AFIP puso su lupa sobre el patrimonio del profesional.
Y para colmo, según él mismo confiesa en la nota mencionada, debió enviar a restaurar los valiosos cuadros recuperados porque algunos habían sido orinados.