En el marco de la denominada Operación Atlantis (investigación de gran alcance contra una banda narco que actuaba a nivel internacional) se incautaron en Escobar nada menos que 900 kilos de cocaína. La droga estaba oculta en una cabaña ubicada a orillas del río Paraná de las Palmas y se cree que iba a ser trasladada en un velero a aguas internacionales para ser comercializada en España.
Si bien trascendió en las últimas horas, el allanamiento se llevó a cabo el pasado lunes 13 y estuvo a cargo de personal de Prefectura Naval y Gendarmería, en una vivienda con muelle situada a la altura del kilómetro 69,5 del río.
Según indica el periodista Alejo Porjolovsky en El Día de Escobar, se secuestraron 890 kilos de cocaína fraccionados en 800 paquetes sellados con plástico y envueltos en piñatas rosas que estaban guardados en 34 “bolsos estancos” (brindan protección total ante agua, polvo y barro). Producto de la pesquisa, además, se detuvo a dos hombres y una mujer que estaban en la vivienda.
Las autoridades incautaron $600.000 también en efectivo, una camioneta Ford Ranger, una camioneta Toyota Hilux y tecnología de punta para rastreos de GPS.
El mismo medio indica que las tareas de vigilancia previas habían detectado movimientos extraños por parte de las personas investigadas. Fundamentalmente, que navegaban en tres embarcaciones intercalando paradas sobre dos viviendas. Los uniformados observaron además a personas que realizaban "pasamanos" de pesadas bolsas desde las viviendas hacia las lanchas, maniobras sospechosas que determinaron que se llevara a cabo un seguimiento desde el agua.
El operativo se inició el sábado 11 por la noche, cuando personal de Inteligencia de Prefectura Escobar junto al Escuadrón Narcotráfico de Gendarmería Nacional se apostó en la zona. Los efectivos de la fuerza de seguridad siguieron a una embarcación semirrígida con un motor fuera de borda que se trasladaba desde el puerto de Escobar hasta una casa de dos pisos ubicada a orillas del arroyo Las Ánimas, en el Partido de San Fernando.
“El seguimiento se hizo durante toda la noche del sábado y todo el domingo. El lunes por la noche se intercepta a esa embarcación, junto a una lancha a motor en una casa alquilada cerca del amarradero Guanabany”, le detalló una fuente que participó del procedimiento a El Día de Escobar.
Más tarde se capturó cerca del canal Honda, en Tigre, un velero llamado Quo Vadis con el que se haría el traslado de la droga a España. Allí se detuvo a otras cuatro personas que estaban a bordo de la embarcación.
Los datos surgidos del operativo permitieron once nuevos allanamientos en diferentes localidades de la provincia de Buenos Aires. El más relevante ocurrió en un country de Canning, partido de Ezeiza, donde se detectaron otros 660 kilos de cocaína ocultos en un placard. Allí, además de la droga, los uniformados secuestraron un total de seis camionetas, cinco autos, tres embarcaciones (un velero, una lancha rápida y un semirrígido), seis motos, siete teléfonos celulares, tres teléfonos satelitales, $ 650.000 pesos, 38.000 dólares, 53.000 euros, 11.300 reales y un dispositivo de almacenamiento de bitcoin.
Larga data
La investigación de la Operación Atlantis comenzó en 2018, a partir la información aportada por un testigo de identidad reservada que se presentó ante la Procuraduría de Narcocriminalidad (Procunar), a cargo del fiscal federal Diego Iglesias.
Según se supo, la banda operaba trasladando la droga en un velero hacia aguas internacionales. Allí, los estupefacientes eran cargado en un barco que los introducía en Europa, donde se ejecutaba la maniobra inversa.
La hipótesis abordó maniobras de lavado de activos, aportes logísticos de transporte y distribución de estupefacientes.
Hasta el momento las autoridades detuvieron a cinco argentinos y un español. El presunto jefe de la banda es un argentino que fue capturado en 2020 en Marbella, España, luego de que le incautara 1.500 kilos de cocaína en un departamento.