La Policía Científica recogió huellas y pruebas de la escena del crimen en el barrio Monterrey.
La Policía Científica recogió huellas y pruebas de la escena del crimen en el barrio Monterrey.
En la madrugada de ayer en el barrio Monterrey de Presidente Derqui, un joven de 25 años murió al recibir dos puñaladas en el pecho con una cuchilla de cocina de veinte centímetros de hoja.
Por el hecho, fue detenido un adolescente de 18 años que se encontraba junto a la víctima ingiriendo bebidas alcohólicas desde horas de la tarde, y tras una discusión habría atacado con el arma blanca a su compañero de tragos. Según fuentes policiales, el supuesto homicida cargaría con antecedentes por otro asesinato cuando aún era menor de edad.
Los hechos se desarrollaron en una casa ubicada en la intersección de las calles Corrientes y Colombia, pasadas las 2 de la madrugada.
Según las fuentes, víctima y agresor son vecinos y se habían reunido en horas de la tarde a compartir bebidas alcohólicas junto a otros jóvenes en el lugar del hecho.
Las horas pasaron y las botellas siguieron circulando, al tiempo que el número de presentes iba disminuyendo.
Las mismas fuentes señalaron que en un momento Daniel Eliseo Medina, de 25 años, comenzó una discusión con Claudio Ariel Pereyra, de 18 años.
En medio de la pelea verbal, aparecieron los golpes de puño y las agresiones físicas. Lo que no está claro es si en ese momento víctima y agresor se encontraban a solas.
Puñaladas
Según las fuentes policiales en el momento en que se daba la pelea, hubo un llamado al destacamento policial de Monterrey. Pero minutos antes de que llegaran los uniformados al lugar, Pereyra habría desenfundado una cuchilla de cocina enterrando la hoja de acero de veinte centímetros de largo, en el cuerpo de Medina.
La primera de las puñaladas fue en el abdomen y la segunda y mortal en el pecho. El golpe fue tan fuerte que el arma se quebró en el tercer intento, el cual también tenía como destino el tórax.
Tras dejar en el piso sin vida a Medina, Pereyra dejó tirado el cuchillo, mango por un lado y hoja por otro, y huyó.
Al llegar la policía, encontró el cadáver y tras recoger información salió en busca del asesino.
El ahora acusado se había refugiado en la casa de un familiar ubicada en Tucumán y Almirante Brown de esa localidad. Sin embargo logró ser apresado.
Del operativo participaron los uniformados de la Subdelegación de Investigaciones (DDI), de la Comisaría 2ª de Presidente y del destacamento del barrio Monterrey de la misma localidad. La investigación quedó en manos del fiscal Gonzalo Acosta, titular de la Unidad Funcional de Instrucción (UFI) Nº 3, quien busca confirmar los antecedentes del acusado por otro homicidio cuando aún era menor de edad.