El suspendido juez federal de Zárate-Campana Federico Faggionatto Márquez aseguró ser “completa, total y absolutamente inocente de los cargos por los que se acusó” en el juicio político que culminó ayer con los alegatos de la acusación y la defensa.
El suspendido juez federal de Zárate-Campana Federico Faggionatto Márquez aseguró ser “completa, total y absolutamente inocente de los cargos por los que se acusó” en el juicio político que culminó ayer con los alegatos de la acusación y la defensa.
Al pronunciar sus últimas palabras ante el “jury de enjuiciamiento”, Faggionatto Márquez afirmó que “no hay absolutamente ningún elemento que pruebe que sea verdad la acusación”.
Tras sus palabras, el presidente del jurado, el camarista Juan Facundo Giudice Bravo, indicó que el próximo 25 de marzo, a las 13 el tribunal dará a conocer su sentencia en la Sala de Audiencias del tercer piso de Libertad 731, de esta Capital.
Previo a ello el abogado Marcelo Brito, defensor de Faggionatto Márquez, había efectuado su alegato donde atribuyó el origen de la causa a una “interna judicial”, principalmente con el Defensor Oficial Alberto Carrara y los fiscales de su distrito.
“La génesis de esas actuaciones están en un mal funcionario público” dijo en alusión a Carrara, a quien calificó de “mentiroso” y con quien, reconoció, su asistido mantenía un “enfrentamiento”.
Brito insistió en la inocencia de Faggionatto Márquez y afirmó que “tocó intereses importantísimos” como cuando citó a prestar declaración indagatoria a Francisco de Narváez en la causa por “la ruta de la efedrina”.
“Esto no termina acá, en este juicio; la historia todavía nos va a entregar mucho más”, afirmó el letrado en forma enigmática como cuando advirtió a los integrantes del jurado de tener “cuidado con construir monstruos que terminen devorándolos”.
El profesional también tuvo algunos párrafos de su alegato para criticar a “los medios de prensa que toman partido en los temas políticos”, y afirmó que algunos periodistas “se valen de casos trascendentes para deformar la opinión pública” y, así, actuar “en aras de la corrupción”.