Jugaba a la guerra con armas cargadas de pintura y terminó muerto

Un hombre de 35 años cayó desde un 4º piso por el hueco de un ascensor cuando participaba del juego llamado paintball. Ocurrió en un edificio abandonado. Los vecinos lo venían denunciando desde hace años. Una recorrida por la fábrica abandonada donde ocurrió la tragedia.

25 de marzo de 2010 - 00:00

Una ambulancia ingresa al predio minutos después del fatal accidente. La víctima murió en el acto.

 

Foto tomada por El Diario tiempo atrás. Así se visten para jugar al paintball.

 

 

Las denuncias de vecinos que datan de entre dos y tres años no pudieron evitar la tragedia por falta de compromiso de las autoridades y finalmente el juego conocido como paintball, en el viejo edificio de la fábrica de Anilinas Argentinas en el barrio Pellegrini, se cobró la primera víctima en la tarde de ayer.

Según fuentes oficiales, un hombre de 35 años, oriundo de la localidad de Florida, perdió la vida al caer por el hueco de un ascensor desde un cuarto piso, una altura no menor a los dies metros, y terminando en una especie de subsuelo.

Según las fuentes, la víctima había llegado al lugar con un grupo de personas que se trasladaron en unos 15 autos hasta el predio, que fue clausurado en varias oportunidades por el Municipio, pero que al poco tiempo volvía a ser utilizado por los amantes de la “guerra virtual” que se desarrolla con armas cargadas de municiones rellenas de pintura (ver aparte).

El hecho ocurrió cerca de las 14 de ayer cuando se realizaba una de las competencia que los vecinos aseguran son moneda corriente durante los fines de semana y días feriados, e inclusive durante la noche.

A pesar del llamativo hermetismo policial, las fuentes señalaron a El Diario, que el hombre se accidentó dentro del viejo edificio, que reconocieron, “está desmoronándose”. Las fuentes señalaron que el hombre que perdió la vida en el acto, fue identificado por la policía como Paulo César Santorelli de 35 años, quien estaba domiciliado en la localidad de Florida, partido de Vicente López.

En el lugar e invadidos por la bronca, los vecinos aseguraron estar cansados de realizar denuncias por la actividad que allí se desarrolla, “incluso a altas horas de la noche y a oscuras”, explicaron.

Los frentistas remarcaron que la tragedia podría haberse evitado si hacían lugar a las denuncias que ellos efectuaron. “el edificio se viene abajo, las escaleras no tienen barandas y está en muy mal estado”, aseguró uno de los vecinos.

En tanto los frentistas apuntan a una de las vecinas del lugar como la organizadora de éstas competencias que atraen a fanáticos de distintos puntos de la provincia y es muy conocida a través de su página web: www.deablick.com.ar. En ese sitio de Internet puede verse el edificio completo y el resto del predio anunciado como “33 hectáreas” y aunque dice que puede jugarse sólo en planta baja, los vecinos aseguran que se ve a los participantes correr por los pisos superiores y que de esa forma se habría producido la muerte en la tarde de ayer.

Según relataron los propios vecinos que se acercaron al perímetro del predio apenas vieron a la policía en el lugar, el casero que es el encargado de cuidar el predio, en el que remarcan “estaba prohibida la práctica de este deporte”, se retiró en un remís y al cierre de la presente edición era buscado por la policía .

“Estamos cansados de hacer denuncias y que no nos den bolilla y tuvo que pasar esto”, aseguró Jesús, uno de los frentistas. Mientras otro reiteró: “el lugar fue clausurado varias veces, pero vienen rompen las fajas y se meten”.

En cuanto a la intervención policial, uno de los vecinos, contó: “cada tanto se ve entrar a un patrullero, pero se va enseguida”.

Pero el testimonio más sorprendente lo dio Enrique T. un pilarense que no vive en la zona, pero que participó del juego hace 15 días.

El joven contó a El Diario que con él, jugaron dos policías y que según señalaron amigos de su entorno que suelen ir al lugar, son muchos los policías que van a divertirse jugando al Paintball en la vieja fábrica, un lugar peligroso y prohibido.

Seguí leyendo

Dejá tu comentario

Te Puede Interesar