Sr. Director:
En el mundo están volviendo a la luz a los arroyos entubados, destapándolos, mediante un fenómeno llamado “Daylighting”, debido a los perjuicios de mantenerlos cubiertos y sobre todo debido a los beneficios que suponen que estén al aire libre. Pero acá en Pilar y Buenos Aires, siguiendo políticas biofóbicas, antropocéntricas y anti ciencia y pro negocio inmobiliario, nos endeudan en cientos de millones, que no tenemos, para poner bajo una alfombra de hormigón amigo lo que no quieren, ni tienen la intención, ni la decisión política de resolver, que es el real saneamiento de los arroyos, la separación en origen y recolección de residuos sólidos urbanos. Además de brindar el servicio de tratamiento cloacal y de aguas grises, de agua potable y segura, de espacios verdes públicos, calles sin barro, para los vecinos/as, y de brindar habitabilidad a quienes fueron forzados a vivir pegados al cauce del arroyo conviviendo con los riesgos de inundación y de salubridad que supone eso.
Esos mismos que permitieron que la población se asiente en zonas naturalmente proclives a inundarse periódicamente, que repartieron y mal vendieron las tierras públicas del humedal del Río Luján a privados para el negocio inmobiliario, para que éstos luego las rellenen, provocaron esas inundaciones dañinas que las obras ecocidas de destrucción del Río Luján y ésta de tapamiento del arroyo Agustoni dicen evitar, pero que en realidad están hechas a la medida del avance del negocio inmobiliario sobre los Humedales del Río Luján.
Se llenan la boca hablando de educación, de economía, de ambiente, y no son capaces de pensar en resolver los problemas sin endeudarnos ni hacer un gran negocio del cemento para pocos, ni de decirle No a una obra que tapa con cemento los problemas de los vecinos y de la sociedad, que no los resuelve y que aleja cada vez más a la sociedad del contacto con el resto de la naturaleza, que tanta falta nos hace.
¿Cuántas cuadras del barrio Agustoni podrían haber pavimentado con todo ese cemento, con todo ese dinero?
Guido Ludueña.
Sr. Director:
Por favor, si pueden publicar que no se puede vivir con el humo de la quema de basura de poda las 24 horas del día, en el barrio Río Lujan. No hay dónde denunciar. No se puede vivir así. Estamos en asfixiados por el maldito humo. Yo también pago impuestos y Arba.
Gilda Bengua.