1818: Desde la Iglesia se encargó la confección de una cruz para colocarla en el lugar donde se había señalado el pueblo nuevo, luego del éxodo que el pueblo experimentó desde su emplazamiento original, a orillas del río Luján. El lugar de instalación de la cruz es la esquina de Pedro Lagrave y Paraná (foto). Esta versión figura en un antiguo escrito firmado por el padre Pascual Alejandro de Rivas. Sin embargo, existe otra versión de su origen: en 1790, unos misioneros que llegaron desde España se detuvieron por una enfermedad que aquejaba a varios de ellos. Allí se habría levantado una cruz de troncos para rezar por los dolientes, estructura que se convirtió en un recordatorio para los religiosos que regresaban al lugar.