9 consejos para hacer de tus suculentas plantas felices y saludables

No subestimes tus suculentas. Aprende cómo cuidarlas, mantenerlas vivas y prósperas.

Por esta razón en esta columna te compartimos 9 consejos para hacer de tus suculentas plantas felices y saludables.

1/ ASEGURATE DE QUE TUS SUCULENTAS TENGAN SUFICIENTE LUZ

Las suculentas aman la luz y necesitan alrededor de seis horas de sol al día, dependiendo del tipo de suculenta. Las suculentas recién plantadas pueden quemarse a la luz solar directa, por lo que es posible que debas presentarlas gradualmente a la exposición total al sol o proporcionar sombra con una cortina transparente.

2/ GIRA TUS SUCULENTAS CON FRECUENCIA

Las suculentas adoran el sol directo, pero si el suyo está sentado en el mismo lugar exacto día tras día, es probable que solo un lado reciba suficiente luz. Rota las plantas a menudo. Las suculentas se inclinarán hacia el sol, por lo que girarlas las ayudará a pararse erguidas. (Inclinarse también puede ser una señal de que necesitan estar en un lugar más soleado).

3/ AGUA SEGÚN LA TEMPORADA

Al igual que nosotros, las suculentas necesitan más energía cuando están en un período de crecimiento. Durante la primavera y el verano, las plantas prosperan y beben mucha más agua que cuando descansan en otoño e invierno. Prueba la tierra con un dedo para controlar si están secas y necesitan ser regadas. El exceso de riego puede matar suculentas, así que asegúrate de dejar que la tierra se seque entre riegos.

4/ RIEGA EL SUELO DIRECTAMENTE

Cuando riegues tus suculentas, remoja la tierra hasta que el agua salga por los agujeros de drenaje. (Si su recipiente no tiene agujeros de drenaje, use menos agua). No uses una botella rociadora para regar tus suculentas; la nebulización puede causar raíces quebradizas y hojas mohosas. También puedes colocarlas en recipientes con agua y permitir que el agua se absorba a través del orificio de drenaje. Una vez que la parte superior del suelo esté húmeda, retíralas.

5/ MANTEN LAS SUCULENTAS LIMPIAS  

Inevitablemente, tus plantas de interior recogerán gradualmente polvo en su superficie, lo que puede inhibir su crecimiento. Limpia las hojas y las espinas suavemente con un paño húmedo (usa un pincel suave para llegar a lugares difíciles de alcanzar).

6/ ELIJE CONTENEDORES CON DRENAJE

A las suculentas no les gusta sentarse en un suelo inundado, por lo que es importante el drenaje para evitar la pudrición. Su recipiente debe tener un orificio de drenaje para permitir que escape el exceso de agua. Las macetas de terracota son ideales para principiantes.

7/ PLANTA EN EL SUELO CORRECTO

Las suculentas necesitan tierra que drene, por lo que la tierra para macetas regular o la tierra de su jardín no funcionarán. Elije tierra de cactus o mezcla tierra para macetas con arena, piedra pómez o perlita. Las raíces suculentas son muy frágiles, así que se suave al trasplantar.

8/CONTROLA LAS PLAGAS Y LOS INSECTOS

Las plagas no deberían ser un problema para las suculentas de interior, pero ocasionalmente puede que tengas que lidiar con los insectos. Los mosquitos se sienten atraídos por las suculentas que se plantan en un suelo demasiado húmedo y que no tiene un drenaje adecuado. Para deshacerte de los huevos y las larvas, rocía el suelo con alcohol isopropílico al 70 por ciento.

Las cochinillas son otra plaga que posiblemente hay que enfrentar. El riego excesivo y la fertilización excesiva son las causas comunes de las cochinillas. Aleja las plantas infectadas de otras plantas suculentas y rocía con alcohol isopropílico al 70 por ciento.

9/ FERTILIZA LAS SUCULENTAS EN EL VERANO

Las suculentas no necesitan mucho fertilizante, pero puedes darles una alimentación ligera durante la temporada de crecimiento de primavera y verano. Cuidado de no fertilizar en exceso, esto puede causar que suculenta crezca demasiado rápido y se debilite.