La ceremonia de coronación del rey Carlos III paralizó a los británicos, independientemente de sus simpatías o antipatías por la monarquía. Es que hace 70 años que el Reino Unido no asiste a una coronación.
La ceremonia de coronación del rey Carlos III paralizó a los británicos, independientemente de sus simpatías o antipatías por la monarquía. Es que hace 70 años que el Reino Unido no asiste a una coronación.
El sábado pasado, ante la presencia de 2.300 invitados en la Abadía de Westminster, el rey Carlos III y su esposa Camila recibieron sus coronas.
La ceremonia fue transmitida y seguida en todo el mundo. Aunque la coronación no tenga gran repercusión en nuestro país, el encargado de asistir fue el embajador argentino en Londres, Javier Figueroa. De América, se hicieron presentes Justin Trudeau (Primer Ministro de Canadá) y Luiz Inacio "Lula" da Silva (Presidente de Brasil).
La coronación tuvo luces, sombras y nubarrones tan densos como el plomizo cielo londinense. La procesión real desde el palacio de Buckingham hasta la abadía de Westminster fue puntuada por actos de protesta de grupos antimonárquicos republicanos. La policía limitó rápidamente las voces disidentes haciendo varios arrestos de los sorprendidos abolicionistas.
Mientras tanto una módica mayoría de súbditos del reino siguió capturada por una ceremonia medieval en el siglo XXI. El despliegue de lujo, joyas, capas de armiño, dorados, púrpura y parsimonia contrasta con la crisis económica y social: el resultado es un incongruente mosaico de medievalismo y contemporaneidad.
La sombra de la fallecida reina seguirá al nuevo monarca. La reina Isabel II se mantuvo apolítica, intachable en su vida privada y pública: la comparación con Carlos es inevitable. El futuro dirá el lugar histórico que este rey tendrá en la monarquía británica.
¡Conoce las curiosidades más destacadas de la coronación de Carlos III!
Tanto Carlos III como la reina Camilla fueron coronados la mañana del pasado 6 de mayo, ocho meses después de la muerte de la reina Isabel II. Curiosamente la fecha coincide con el cumpleaños de Archie Mountbatten Windsor, el hijo del príncipe Harry y Meghan Markle, quien a diferencia de sus primos no asistió a la ceremonia.
Desde la coronación de Guillermo I en 1066, la abadía de Westminster ha sido el escenario de las ceremonias de coronación de los 39 monarcas que preceden a Carlos III en la historia de la monarquía británica. Fue allí donde también él fue ungido rey.
A diferencia de sus predecesores, Carlos III y Camilla viajaron de Buckingham a Westminster en el Carruaje de Estado de la Celebración de Diamante de Isabel II. Mientras que la vuelta se producirá en la Carroza de oro.
Como en casi todas las coronaciones celebradas desde 1066, fue el arzobispo de Canterbury quien ofició la ceremonia de coronación de Carlos III. El lo ungió con el aceite sagrado de la coronación y colocó sobre su cabeza la corona de San Eduardo, coronándole así oficialmente como rey Carlos III. El monarca ocupó la llamada Silla de la Coronación portando el cetro y la varilla del soberano como antiguo símbolo de su poder sobre la nación británica y el orbe en representación de la cristiandad.
Si. Aunque, al igual que ocurrió en la coronación de la reina Isabel II, uno de los ritos de la ceremonia se llevó a cabo fuera de cámara. Se trata del instante en el que el arzobispo de Canterbury ungió a Carlos III con los sagrados óleos (veganos) que le convirtieron en rey.
Custodiadas en la Torre de Londres, las insignias de la coronación son las joyas y demás objetos preciosos que tradicionalmente se utilizan en esta ceremonia. El conjunto incluye tanto las coronas que utilizaron los reyes Carlos III y Camilla como otras piezas históricas como son la Ampolla de oro que contendrá el aceite sagrado con el que será ungido Carlos III y la cucharita que se usará para ese momento (el objeto más antiguo de las regalías); el anillo de zafiros, rubíes y diamantes del rey (creado en 1831 para la coronación de Guillermo IV); el orbe y los cetros de cruz y paloma que llevarán Carlos III y Camilla.
El máximo símbolo de la coronación es, precisamente, la corona de San Eduardo. La actual es la que se usó en las coronaciones de Jorge VI e Isabel II y se basa en el diseño de la que portó sobre su cabeza la reina Victoria en 1837. Cuando no ocupa la cabeza un monarca, está en la Torre de Londres, con el resto de las joyas reales, en exhibición. Fue encargada por Carlos II en 1661 para reemplazar una corona que se derritió en 1649. Debido a su peso, se usa únicamente en el momento exacto de la coronación.
Ella tienes casi 3000 piedras, incluyendo 2868 diamantes, 273 perlas, 17 zafiros, 11 esmeraldas y cinco rubíes. Pesa algo más de dos kilos. Expertos en joyería estiman que su valor monetario es incalculable.
La corona del Estado Imperial fue creada para la coronación del rey Jorge VI en 1937. Normalmente se usa en las ceremonias de apertura del Parlamento inglés. Carlos la usó al salir de la Abadía de Westminster.
La corona de la reina María:
Con una altura de 25 cm, fue creada para la coronación de Jorge V en 1911 y es la que usó Camilla. Ha sido rediseñada con algunos diamantes que pertenecían a la colección privada de joyas de la reina Isabel II.
Tras la ceremonia en la abadía de Westminster los reyes y la familia real desfilarán por las calles de Londres hasta llegar al palacio de Buckingham, donde se asomarán al balcón a saludar al público.
Para el día de la coronación se ha alentado a las comunidades para que organicen almuerzos y fiestas en la calle con sus vecinos. La iniciativa “The Big Lunch” fue organizada por el Proyecto Edén, una causa que Camilla representa desde 2013 y que busca promover el espíritu de comunidad y reducir la soledad de la gente.
Al día siguiente por la tarde, el castillo de Windsor se convirtió en el escenario del concierto de la coronación. El lunes 8 de mayo también será festivo para los británicos, a quienes se ha pedido que lo celebren colaborando con alguna organización benéfica local.
Setenta años después del ascenso al trono de la reina Isabel II, estos son algunos de los cambios en la ceremonia de coronación de Carlos III.
Carlos III había dicho que quería que su coronación representara los valores del Reino Unido actual, un país de diferentes etnias y religiones, muy diferente al de 1952, el año en que su madre ascendió al trono. Para ello se modificó la ceremonia, en la que tradicionalmente los roles principales correspondían a la aristocracia.
LA INVITACIÓN PARA LA CORONACIÓN
La invitación fue impresa en cartulina reciclada con detalles en pan de oro. Su diseño incluye los escudos, las iniciales de Carlos y Camila, criaturas alegóricas, una filigrana dibujada a mano alzada con acuarela y gouache (representando un fértil universo natural), flores, hierbas, frutos, mariposas y el mascarón del Hombre Verde (una figura de folclores británico que simboliza el renacer de la primera y otras especies británicas de pradera) junto a las cuatro flores nacionales del Reino Unido: Narciso: símbolo de Gales, Cardo: símbolo de Escocia, Trébol: símbolo de Irlanda y Rosa: símbolo de Inglaterra.
No es una simple invitación, es todo un homenaje al reinado de Carlos III, a través de la naturaleza y el folclore británico.
NÚMERO DE INVITADOS
Unas 2.300 personas asistieron la ceremonia, una cifra notablemente inferior a los más de 8.000 que presenciaron la coronación de la reina Isabel II hace siete décadas. Entre ellos se encuentran los miembros de la familia real británica, el primer ministro Rishi Sunak, jefes de Estado y miembros de la realeza de otros países. La novedad es que en esta ocasión la corona británica invitó a sus pares, como los reyes de España, Felipe VI y Letizia, además de los reyes de Los Países Bajos Guillermo y Máxima.
Dado el espacio limitado de la abadía, se dio prioridad a 850 invitados de la sociedad civil, que han sido condecorados por la monarquía por su beneficio para la sociedad. Entre ellos, algunos representantes del sistema nacional de salud, como agradecimiento a su gran labor durante la pandemia.
DURACIÓN DE LA CEREMONIA
Su coronación no fue tan extensa como la de su madre, pero sí igual de fastuosa. Mientras que la coronación de Isabel II duró tres horas, la de Carlos III se prolongó por 90 minutos.
MÚSICA PARA EL EVENTO
La música fue parte importante durante la coronación de Carlos III, por lo que el mismo eligió las 12 piezas para la ceremonia, entre ellas algunas de compositores como Sir Andrew Lloyd Webber y Patrick Doyle. Por primera vez en una coronación se escuchó un gospel y un canto en lengua galesa. También existe una playlist oficial en Spotify, con canciones de grandes artistas como los Beatles, David Bowie, Coldplay, Ed Sheeran, Spice Girls, Michael Bublé y Harry Styles.
EL RITO DEL JURAMENTO
Se modificó para incluir la promesa de la Iglesia anglicana de fomentar un ambiente en el que personas de todas las confesiones y creencias puedan vivir libremente.
Mujeres, personas de minorías étnicas y líderes de religiones no cristianas tuvieron algunos de los papeles ceremoniales que antes tenían los nobles, la mayoría de los cuales no fueron invitados.
LA UNCIÓN CON UN ACEITE ANCESTRAL APTO PARA VEGANOS
El aceite que ha investido a Carlos III se basa en el utilizado en la coronación de la reina Isabel II hace siete décadas, con una fórmula tradicional que se remonta a cientos de años atrás. Esta contenía aceite de civeta africana, extraído de las glándulas anales de estos pequeños mamíferos felinos, y ámbar gris de los intestinos de las ballenas.
Sin embargo, el aceite sagrado que se ha utilizado el sábado tiene una fórmula adaptada a los nuevos tiempos. Tanto, que es apta para veganos. El nuevo unto se ha creado utilizando aceitunas cosechadas en dos arboledas en el Monte de los Olivos, al este de Jerusalén.
LA VESTIMENTA DEL REY CARLOS III
Tradicionalmente, se confeccionan nuevos ropajes para cada coronación, a excepción de la túnica superior y el palio real, que se remontan a la coronación de Jorge IV, en 1821. Durante la investidura se lucen ambos.
Uno de los cambios más notorios en la coronación de Carlos III fue su propia vestimenta, ya que contrario a los reyes y reinas anteriores, Carlos decidió usar el uniforme de gala de la marina británica.
También, existen detalles para reflejar su mentalidad más moderna y sustentable del monarca:
- Carlos IIIapostó por la sustentabilidad y el reciclaje de sus prendas. Él reusó prendas históricas de la colección real.
- El rey quiere reflejar a través de su vestuario un look más cercano al pueblo y menos formal. Sin embargo, para la coronación, los protocolos reales y tradiciones exigen un traje digno de la realeza.
- Túnicas elaboradas en oro hacen parte de los ítems elegidos por el llamado rey con mentalidad ecológica. El Rey decidió reutilizar prendas de la coronación de su abuelo, el rey Jorge VI. La súper túnica es la pieza central del atuendo del rey, y fue tejida en brillante seda de oro en 1821, y la llevo debajo del Manto Real Imperial. Además, vistió otras dos túnicas que no habían sido usadas por más de siete décadas.
- En el momento de la coronación dentro de la Abadía de Westminster, Carlos usará la misma túnica que su madre, la reina Isabel II llevó en la ceremonia de 1953.
EL TÍTULO DE CAMILA
Cuando Isabel II fue coronada, Felipe, su esposo, fue nombrado príncipe. En el caso de Camilla, aun cuando no es la heredera al trono, será llamada “reina” sin la coletilla de “consorte”. Fue la propia Isabel II quien unos meses antes de morirexpresó su deseo de que su nuera acompañara a Carlos III con este título.
CÓDIGO DE VESTIMENTA
Anteriormente, las ceremonias de coronación tenían un código de vestimenta muy estricto, tanto para hombres como para mujeres, quienes debían llevar frac negro y vestido de gala respectivamente. Sin embargo, en esta ocasión los invitados podrán llevar traje de negocios y vestidos de fiesta, con el fin de darle un toque moderno a la ceremonia y facilitar la asistencia de los invitados.
LOGO DEL GRAN DÍA
El logo que fue parte de ese día, fue realizado por Sir Jony Ive, reconocido por sus innovadores diseños como el del iPhone y algunos otros dispositivos de Apple. Aunque el logo sigue siendo tradicional, se destacan las flores que Ive colocó alrededor de la corona de San Eduardo y que simbolizan el optimismo de la primavera y el amor de Carlos III por la naturaleza.
SALUDO EN EL BALCÓN
El clásico saludo desde el balcón solo contó con la presencia de 15 miembros de la familia real. Las mayores ausencias fueron las de su hijo Harry y su hermano Andrés, ya que ellos dos no son miembros trabajadores de realeza. Meghan Markle, la esposa de Harry, y sus hijos no estuvieron presentes en el evento porque se quedaron en Estados Unidos.
COSTO DE LA CORONACIÓN
No hay datos oficiales sobre el costo del evento. Según recogió “The Times”, los expertos calcularon que la coronación de Carlos III podría costar más de 100 millones de libras.