Los yogures Dahi irrumpieron en las góndolas en el año 2007 para traernos de vuelta los envases de la época de nuestras abuelas, antes de que el plástico arrasara con todo. Y también sabores artesanales y poco convencionales que fueron otorgándole un sitio de prestigio en el mercado. Fundada hace 19 años, la planta está ubicada en la localidad de Villa Rosa.
La empresa se fundó en 2005 gracias a la iniciativa de tres socios que habían sido parte de la empresa Parmalat, todos vecinos del Partido de Pilar. En 2007 salió el producto al mercado y el vidrio fue una circunstancia del momento, con el tiempo le dieron una vuelta de rosca a la empresa lanzando nuevos productos. En 2022, la sociedad se reformuló y se incorporó a Ezequiel Klemencic y familia.
Si bien inicialmente fue construida sobre un predio de 5.500 m2 con un espacio cubierto de 1.500m2 y dio sus primeros pasos con un plantel de apenas 4 personas. En la actualidad, ya supera los 2000 m2, posee 62 personas trabajando, donde el 70% es personal pilarense. Además, en ella tiene lugar toda la cadena de producción, desde la fermentación de la leche proveniente de tambos, hasta el envasado. Por otro lado, también posee remodelaciones vigentes, que consisten en una planta de efluentes, ampliaciones en la cámara de frío entre otras mejoras permanentes. Todo ello en una búsqueda constante de continuar con los principios de la empresa, pero a la vez ampliar un poco más los horizontes para llegar a cada hogar argentino.
En ese contexto, al cierre del 2023 presentaron una nueva propuesta entre sus productos lácteos fermentados premium y sumaron una renovada línea de batidos saborizados en envase pet; un poco más económicos, pero con el clásico sabor a fruta y cremosidad que los caracteriza. De mora, durazno, vainilla, frutilla o coco, cualquiera de sus variedades ya pueden ser adquiridas en los diferentes supermercados del país y el distrito por menos de 1000$ la unidad. Volviéndose una opción más de snack saludable y práctico de trasladar. El recipiente es transparente, 100% reciclable, la tapa es más liviana y la etiqueta es más chica.
En diálogo con el Diario, Marcelo Grazioli socio fundador de la empresa explicó que si bien ‘‘Inicialmente eran todos los productos en envase de vidrio’’, eso fue una circunstancia del momento. Por lo que a raíz de diferentes estudios de mercado se percataron que existía un público al que podía llegar y en ese contexto surgió esta alternativa que generó una importante repercusión entre sus consumidores y diferentes usuarios de redes sociales que temían por la ‘’extinción del pote de vidrio’’.
‘‘ Se generó el ruido de si Dahi dejaba o no dejaba de producir en vidrio. Yo siempre digo lo mismo, uno puede pensar positiva o negativamente. Un ser humano puede decir: ¡Qué bueno ahora además de vidrio tienen pet ! Abarcan a más público. O uno puede decir: ‘hacen esto para matar lo otro’, entonces uno lo deja abierto. La realidad es que nosotros; el corazón de nuestro negocio es el envase en pote de vidrio, no lo dejaremos nunca, ni lo vamos a dejar nunca. Podemos cambiar una presentación , porque se vende menos. Porque aparece otra que es más novedosa, pero la realidad es que el vidrio va a seguir estando siempre’’, aclaró Marcelo y agregó: ‘‘ El pet es un envase de un gramaje un poco más chico, yo lo defino como que es un producto para consumirlo en otra experiencia, en otro momento. No es lo mismo tomarse un descanso, aprovecharlo para un momento de tranquilidad, un placer o postre; que un snack de media mañana en el auto u oficina. Y en este es otro momento, en otro lugar, donde uno está medio apurado o las madres quieren dárselo a un hijo en la lunchera, es cuando piensan: ‘ no le voy a dar un envase de vidrio’.
Entonces la idea es abarcar, siendo que nuestro negocio es producto fermentado premium, tener la mayor cantidad de posibilidades para el consumidor, eso es lo que quisimos hacer’’.
UN DAHI PARA CADA DÍA
Durante las últimas dos décadas, Dahi tuvo y tiene en claro cuales son sus ideales. Y más allá de la comodidad o la estética del frasco, Marcelo reconoce solo una filosofía en la visión y misión de la empresa: ‘‘Producir un producto que puedan consumir sus hijos todos los días de su vida y les haga bien’’.
Por ello, dentro de todas las variedades existentes, en la línea de yogures firmes y batidos con fruta, la compañía tiene previstos nuevos lanzamientos, en los que conservarán su tradicional envase de vidrio. La marca ofrecerá nuevas combinaciones de sabores y tiene previsto incursionar en segmentos en los que aún no son protagonistas.
‘’Nosotros ahora vamos a lanzar un yogur que va a ser una novedad absoluta en la Argentina y creo que en el mundo. Se trata de un yogur deslactosado, sin azúcar, sin edulcorante, con prebióticos, con probióticos y semidescremado, o sea que es un producto que es salud pura no será un yogur que cuando uno lo coma va a sentir un placer de gusto o de algo tan rico, pero es salud pura’ ’, destacó orgulloso el empresario.
Por otro lado, también explicó que todos sus yogures,- como los de la competencia-, tienen una acción que mejora la microbiota del ser humano, por eso es bueno ‘’comer uno por día’’.
‘’Nosotros lo que hacemos es tratar de que ese bueno, sea cada vez mejor y cada vez más sano y que cada vez ayude más a la salud de las personas. Entonces eso es lo que tenemos y que seguimos haciendo. Cada vez apuntamos más a la salud, porque se descubren cosas nuevas y hay que seguir esa tendencia’’.
Para finalizar, Marcelo también anticipó que para reforzar el concepto del vidrio van a lanzar 12 presentaciones nuevas en ese material. Además aseguró que están en el proceso de la habilitación de la planta para exportar y el objetivo en los dos próximos años es al menos duplicar la capacidad de la planta.