El pequeño Felipe, bebé pilarense que a principios de noviembre recibió un trasplante de corazón, vivió un momento de plena felicidad en las últimas horas: volver a encontrarse con su hermano mayor, Milo.
El bebé pilarense recibió un trasplante de corazón en noviembre. Luego de dos meses pudo ser visitado por Milo, su hermano mayor.
El pequeño Felipe, bebé pilarense que a principios de noviembre recibió un trasplante de corazón, vivió un momento de plena felicidad en las últimas horas: volver a encontrarse con su hermano mayor, Milo.
"Hoy el hospital se llenó de risas -expresó su familia-. Después de dos meses de espera, Milo pudo entrar a ver a Felipe. El hermano mayor volvió a encontrarse con su amor más chiquito. Pudo abrazarlo con ese amor inmenso que no entiende de tiempos ni de hospitales".
En el reencuentro "hubo sonrisas y esas miradas que solo los hermanos entienden, se extrañaban y se notó". Además, agregaron: "Milo es el hermano mayor más orgulloso y enamorado de su Feli. Y nuestros corazones, completos otra vez. Gracias, gracias, gracias".
Felipe -que cumplió 1 año en septiembre- nació con una cardiopatía dilatada, condición que hacía indispensable la realización de un trasplante de corazón para poder vivir. A través de la cuenta de Instagram @elcorazondefeli, la familia fue y sigue relatando su día a día y concientiza sobre la donación pediátrica.
Finalmente, el corazón llegó y el pequeño pudo ser intervenido en el Hospital Garrahan, donde sigue su recuperación.
