La Ley nacional 27.642 de Promoción de Alimentación Saludable -conocida como de Etiquetado Frontal- se sancionó el 26 de octubre de 2021 y el 23 de marzo de 2022 se publicó el decreto reglamentario 151/2022.
La Ley nacional 27.642 de Promoción de Alimentación Saludable -conocida como de Etiquetado Frontal- se sancionó el 26 de octubre de 2021 y el 23 de marzo de 2022 se publicó el decreto reglamentario 151/2022.
¿Cómo impacta en el consumo diario de los consumidoras el encuentro en góndolas con sellos que indican excesos de grasas saturadas, azucares, sodio, entre otras señales de alerta que se incluyen en la ley de “Etiquetado Frontal”? ¿Cuáles son los productos que mayor impacto sufrieron?
Según reveló el Mapa Normativo del Etiquetado Frontal presentado en agosto de este año, hubo un avance del 63,3% de los aspectos normativos necesarios para su implementación (sellos, regulación de publicidad, entre otros aspectos), aunque sólo siete provincias adhirieron, lo que impacta principalmente en la falta de reglamentación de los entornos escolares y en las compras públicas de cada jurisdicción.
El Mapa Normativo del Etiquetado Frontal en Argentina se trata de una herramienta desarrollada por la Fundación para el Desarrollo de Políticas Sustentables (Fundeps) y la Fundación Sanar presentado en la jornada inaugural del 1° Congreso de Políticas Alimentarias en Argentina realizado el mes pasado.
“De acuerdo a las variables estudiadas hasta agosto de este año respecto lo que propone la ley, se observa un avance normativo en la política pública del 63 por ciento respecto su aplicación en todo el territorio nacional” confirma a Noticias Argentinas, Ignacio Porras, nutricionista y director ejecutivo de la Fundación SANAR.
“La ley de etiquetado frontal es de alcance nacional para todos los alimentos y bebidas, ya sean producidos dentro o fuera del país: si se venden en el territorio deben cumplir con la normativa del etiquetado frontal. Los plazos de adecuación ya terminaron por lo tanto esta medida ya está implementada al 100 por ciento en todo el país”, detalla.
Sin embargo, según datos relevado por el Mapa Normativo, sólo 7 provincias adhieren y tuvieron avances en la aplicación por cada jurisdicción: Salta, Chaco, La Rioja, Neuquén, Río Negro, Chubut y Tierra del Fuego.
En relación a lo que sucede en las góndolas de la Ciudad de Buenos Aires y el AMBA, que es donde hay presencia masiva de sellos, Porras considera que “se ven más cantidad de sellos en productos fundamentalmente por una cuestión de densidad demográfica, y por tener mayor rotación y distribución de mercadería respecto otras provincias”.