Este año, cuatro planetas cambiarán de signo, haciendo que el 2025 se destaque.
El año 2025 es el número nueve en numerología, lo que representa el cierre de un ciclo. Las cosas tienden a llegar a un punto de culminación o de cosecha en un año número nueve, ya que podemos cosechar lo que hemos sembrado y cerrar la puerta a las cosas que debemos dejar ir.
Este año, cuatro planetas cambiarán de signo, haciendo que el 2025 se destaque.
Júpiter entrando en Cáncer, Saturno entrando en Aries, Urano entrando en Géminis y Neptuno entrando en Aries. Los nodos lunares también entran en Piscis y Virgo.
En sintonía con el tema de los finales, parece que 2025 nos ayudará a cerrar algunos grandes ciclos cósmicos con los que hemos estado trabajando durante algún tiempo.
Comenzamos el año con Marte retrógrado, invitándonos a bajar el ritmo, reflexionar y recalibrarnos, en lo que respecta a cómo elegimos gastar y enfocar nuestra energía.
El año 2025 también trae consigo un nuevo ciclo de eclipses en Piscis y en Virgo, cada eclipse, nos guiará para atraer armonía y equilibrio en el plano espiritual (Piscis) y en el plano práctico (Virgo)
Tanto Piscis como Virgo son energía que nos alientan a ir por nuestra intuición y experiencias espirituales.
Con tantos movimientos planetarios importantes en 2025, parece que el ritmo está cambiando. Si bien es posible que no podamos darnos cuenta por completo de todos los cambios, estaremos obteniendo muestras de lo que vendrá cuando comience el año 2026, un año número uno y un momento de nuevos comienzos.
El 6 de Enero Marte entra retrógrado en Cáncer. Nuestro enfoque puede centrarse en nuestro hogar y nuestra vida familiar.
Este movimiento de Marte también puede despertar heridas en torno a lo que nos hace sentir seguros. También nos está ayudando ayudando a ver cómo gastamos nuestra energía y en dónde la enfocamos. Depende de nosotros reescribir los patrones del pasado y reconocer lo que es valioso e importante para nosotros.
La piedra aliada es el Cuarzo Cristal.
Instagram: @hv.stones
María Ana Belvisi