Cientos de feligreses se acercaron ayer a la parroquia San Cayetano, de la localidad de Del Viso, para venerar una vez más al santo de la providencia y patrono del pan y del trabajo. Si bien las misas se repitieron a lo largo del día, la celebración central se llevó a cabo a las 16 y fue presidida por el obispo de San Miguel, Sergio Fenoy.
Cayetano de Thiene nació el 9 de octubre de 1840 y murió el 7 de agosto 1547 en Nápoles. Nacido en una familia adinerada, a lo largo de su vida fue desprendiéndose de todos sus bienes, repartiéndolos a gente de bajos recursos y trabajando porque otros pudieran comer. Es esta la razón por la cual se lo considera el Patrono del pan y del trabajo.
El párroco delvisense Fernando de la Peña, destacó que "como pasa todos los años, vinieron peregrinos de muchos lugares cercanos, aquellos que no van hasta Liniers”.
A las 15 comenzó la celebración principal con la procesión por las calles de Del Viso, donde la imagen del santo fue llevada en una autobomba. Como suele suceder en esta fecha, la gente se acercó con velas y alimentos que serán destinados a Caritas.
"No falto jamás”, aseguró Rosa, de 46 años, quien llegó ayer a Del Viso desde José C. Paz para pedir por "la salud de un sobrino y trabajo para su hijo”.
Por su parte, Claudio hizo el trayecto desde Luján para "agradecer, porque, aunque ahora estoy bien, mejor no cortar la racha”. "Vengo desde hace 20 años y éste se nota que no estamos bien, el bajón, la crisis, la falta de trabajo se nota en la cara de la gente”, agregó.