El sentimiento de dolor por la desaparición del submarino ARA San Juan, sumado a la angustia por la confirmación de una explosión que limita las esperanzas al mínimo, involucra a una familia de Capilla del Señor.
El sentimiento de dolor por la desaparición del submarino ARA San Juan, sumado a la angustia por la confirmación de una explosión que limita las esperanzas al mínimo, involucra a una familia de Capilla del Señor.
Es que, entre los 44 tripulantes del submarino, se encuentra el cabo primero Luis Niz, vecino de la localidad aledaña.
Egresado del Instituto José Manuel Estrada, donde fue un alumno destacado, con 25 años es uno de los más jóvenes de la tripulación del submarino desaparecido.
El año pasado había sido el mejor promedio en el curso de submarinista, y al regreso del viaje tenía una meta por demás importante: antes de partir había fijado fecha de casamiento para el próximo 7 de diciembre, con la cabo primero músico Alejandra Morales.
Todo el pueblo reza por él y por el resto de la tripulación, aferrado a una mínima luz de esperanza.