En la madrugada de ayer, el Municipio y las fuerzas de seguridad encararon una serie de operativos para controlar la seguridad y el consumo de alcohol en los micros que transportan adolescentes hacia fiestas de egresados, generalmente en la Ciudad de Buenos Aires.
No obstante, algunos jóvenes involucrados dialogaron con El Diario y afirmaron que dicho operativo tuvo algunos "excesos”, en especial por parte del personal femenino de seguridad, que habría actuado con cierta agresividad hacia ellos.
La fiesta de egresados a la que iban era del Colegio North Hills, en el boliche porteño Caix. Las acciones fueron llevadas a cabo por la subsecretaría de Regulación del Transporte del Municipio, con apoyo de áreas como Nocturnidad y el Servicio de Apoyo Policial (SAP).
Cristian Rasmussen, titular de Nocturnidad, indicó en Código Plaza (FM Plaza 92.1) que "queremos que esto se maneje en forma ordenada, prolija y segura. Por eso controlamos que el micro tenga seguro y VTV. Además, retuvimos todo el alcohol que estaba en los vehículos”.
Los operativos se desarrollaron en Panamericana y Caamaño, y a la altura del kilómetro 50. "No queremos que los chicos dejen de divertirse, sobre todo si los padres están de acuerdo, pero que sea en forma segura”, dijo el funcionario. Y agregó que los choferes "no controlan la presencia de alcohol, por eso somos nosotros los que tratamos de evitar que eso suceda”.
En este sentido, desde el Municipio se informó que como resultado de este operativo se produjo el secuestro de tres unidades, "las cuales no poseían la documentación en regla, detectando faltante de seguro obligatorio, licencias con categorías no habilitantes para desarrollar esta actividad y ausencia de habilitación, todo fuera del marco regulatorio vigente”.
Por otra parte, Rasmussen comentó que "los padres estuvieron muy agradecidos, entendieron que lo hacemos para garantizar la seguridad de los chicos”.
A su vez, en cuanto a la planificación previa de estos operativos, reconoció que "estamos pendientes de las redes sociales para ver cuándo se convocan este tipo de traslados”.
Quejas
No obstante, en diálogo con El Diario, adolescentes que estuvieron involucrados en los controles del kilómetro 50 afirman que los operativos incluyeron algunos excesos por parte del personal de seguridad.
"En los colectivos había chicos de varias escuelas de Pilar. Antes de salir, cuando ya estábamos sentados, llegaron las patrullas y una mujer policía nos hizo bajar a los gritos”, relató R., una de las jóvenes. Y continuó: "Buscaban alcohol, siempre gritando, y nos hicieron apoyar las manos contra el colectivo. Cuando nos revisaron, nos tocaron mucho. No era necesario”.
En este sentido, C., compañera que también estaba en el micro, contó que "como una de las chicas se había puesto un manojo de llaves cerca del corpiño, las oficiales gritaron ‘revísenles los corpiños a todas’. A otra, hasta le contaron la plata que llevaba en la billetera. Nos amenazaron con que nos iban a llevar a todos a la comisaría”.
Las adolescentes reconocieron la presencia del alcohol en el micro, aunque indicaron que las botellas eran llevadas por compañeros que ya cumplieron los 18 años. Finalmente, su rodado fue uno de los que no pudo salir, por lo que debieron llamar a sus padres para retornar a sus casas.
"Estamos pendientes de las redes sociales para ver cuándo se convocan este tipo de traslados, más en esta época del año”.
CRISTIAN RASMUSSEN.
"Buscaban alcohol a los gritos y nos hicieron apoyar las manos contra el colectivo. Cuando nos revisaron, nos tocaron mucho”.
R., JOVEN INVOLUCRADA.