Con una ruidosa y colorida protesta, los trabajadores bloqueron Carrefour.
Con una ruidosa y colorida protesta, los trabajadores bloqueron Carrefour.
La protesta gremial en reclamo de mejoras salariales que realizaron el viernes pasado los empleados de Jumbo, Easy y Carrefour volvió a repetirse ayer por la tarde. Pero en esta oportunidad, la paralización de la actividad en esos tres establecimientos fue absoluta.
Porque si bien Carrefour y Easy ya habían permanecido cerrados al público el pasado viernes, a raíz de la misma medida de fuerza, ahora también Jumbo –que en la primera jornada de paro fue atendido por personal jerárquico- no permitió el ingreso de clientes a su salón de ventas.
El ruidoso reclamo que se extendió entre las 12 y las 16 volvió a incluir ayer bombos, redoblantes, pirotecnia y el pedido de un aumento en los haberes que haga trepar el sueldo mínimo desde los 1.380 pesos actuales hasta los 3 mil.
“Tenemos distintos modos de vida”, fue la escueta pero contundente respuesta del director regional de Carrefour Argentina, Patricio Peralta, al ser indagado por los trabajadores acerca de si él podría vivir y mantener a su familia con el salario que ellos perciben.
Eran las 11.30 cuando la totalidad del personal de ese hipermercado, perteneciente al Sindicato de Empleados de Comercio (SEC), bloqueó los ingresos al establecimiento y sólo se continuó atendiendo a los clientes que se encontraban realizando la fila frente a las cajas.
A través de este tipo de manifestaciones, el gremio busca forzar –además del aumento salarial- la “discusión del convenio por rama, un fallo de caja del 20% del salario básico, y domingos pagos al 100%”, entre otras reivindicaciones.
Aunque la protesta no produjo roces entre los manifestantes y los clientes, algunos de los que se encontraban en los locales a la hora del inicio de la medida de fuerza se quejaron como consecuencia de que debieron soportar largas colas para pagar ya que por el paro de actividades había menos cajas habilitadas que las habituales.
Conciliación obligatoria
El ministerio de Trabajo consiguió firmar ayer la conciliación obligatoria en el conflicto con el sindicato de comercio que mantuvo paralizados a los hipermercados. El acuerdo rige desde las 0 de hoy y se mantendrá por 15 días hábiles.
Esta medida, sin embargo, no logró evitar los trastornos registrados ayer en las sucursales de Jumbo, Carrefour y Easy, producidos justo un sábado, cuando varias compañías ofrecen descuentos de todo tipo a sus clientes.
A raíz del conflicto, el presidente de la Cámara Argentina de Comercio (CAC), Carlos de la Vega, presentó ayer ante el Ministerio de Trabajo un “pedido urgente de conciliación obligatoria” para alcanzar un acuerdo que permita destrabar el conflicto.
Según el gremio, los paros se inician “ante la negativa de las cámaras empresariales en el pedido de paritarias”, que incluye “aumento salarial; el pago del 100% de los días domingos; incremento de adicional de caja; un marco regulatorio del trabajo a tiempo parcial y jornada reducida e incremento de las zonas desfavorables”.
Sin embargo, De la Vega explicó que desde el sindicato “pretenden desconocer el acuerdo firmado en enero (último) y que de un día para otro se calculen estos beneficios sobre el básico y todos los aumentos no remunerativos”.
Mañana
Anunciarían nuevas medidas
Los sindicalistas de Pilar aclararon que, de no producirse mañana una respuesta satisfactoria al pedido, convocarán a una movilización y huelga nacional. Pero la misma medida registrada a nivel local se replicó en varios puntos del Gran Buenos Aires. Ayer por la tarde, cerca de 100 empleados mercantiles bloquearon con changuitos la entrada de un Carrefour ubicado en el ingreso al partido de San Martín, en la intersección de las avenidas San Martín y General Paz. Los manifestantes advirtieron que de no ser escuchados tomarán ese centro comercial por tiempo indeterminado.
El jueves último, los representantes del empresariado (CAC, CAME y UDECA) y los empleados se reunieron en el Ministerio de Trabajo para destrabar las negociaciones salariales, pero no lograron llegar a un acuerdo, por lo que mañana deberán reunirse de nuevo.