Una de las joyas de la vasta filmografía del Clint Easwood, en este caso dedicada a Nelson Mandela y sus primeros años al frente de la presidencia de Sudáfrica luego de 27 años en prisión. En 1995, el país organizó el Mundial de Rugby y fue el motivo ideal de “Madiba” para enterrar de una vez por todas al apartheid y unir al país. Con Morgan Freeman en el papel del líder pacifista y Matt Damon como François Pienaar, capitán de los Springboks.