Desde hace años, Analía Sabi rescata perros
abandonados y asegura que "cada vez hay más perros en la calle porque no
funcionan los elementos de contención por parte del Estado para ver qué se hace
con esos animales”. Quienes transitan las calles de Pilar, pueden ver a perros
y cachorros en situación de calle, en muchos casos en pésimas condiciones
sanitarias.
Ante esta situación, son muchos los que deciden
reunirse para armar grupos de rescatistas y así intentar paliar una problemática
de la cual debería hacerse cargo algún organismo estatal. Analía Sabi es una de
las personas que, a pesar de no dar abasto, sigue juntando perros tanto en la
casa, como en su local y en la veterinaria Zooluciones. "Juliea Ghidoni, de la
veterinaria, nos da una mano enorme y la verdad es que somos un grupo de
personas comunes que tratamos de hacer algo para ayudar a los animales pero
realmente hacemos lo que podemos, no nos sobra la plata, el espacio ni el
tiempo”, indicó.
"Hay que fomentar una consciencia de castración,
explicarle a la gente los beneficios de este procedimiento tanto en hembras
como en machos, porque cada vez hay más perros en la calle en todos los barrios
de Pilar, cada vez más son los animales atropellados o con enfermedades”,
relató Sabi que, al momento de ser
crítica, apuntó contra Zoonosis: "Estamos haciendo lo que se puede dentro de
nuestras posibilidades, pero necesitamos que el gobierno nos acompañe. Zoonosis
está abandonado desde hace muchos años, no es algo de este gobierno”.
Al parecer, de acuerdo a lo que contó Analía,
Zoonosis debería hacerse cargo de realizar 100 castraciones diarias, 50 en el
edificio del organismo y la otra mitad en el quirófano móvil lo cual, según
sostuvo, no se está haciendo. "La gente llama a Zoonosis y les dan turno de
castración a dos o tres meses, por lo que muchas veces las personas se olvidan
o la perra ya entró en celo y quedó preñada”, indicó. "Se necesita un sistema de turnos y de
abordaje del tema mucho más profesional”, remató.
Analía no es la primera persona en denunciar el
accionar de Zoonosis; en meses anteriores asociaciones civiles han remarcado lo mismo. "Es
muy precario todo, el edificio de Zoonosis, si bien ahora se está por mudar,
hace años que está destruido, el quirófano da lástima y sus instalaciones son
muy básicos. No es para el Pilar de hoy con toda la gente que ha venido ni con
la cantidad de mascotas que hay abandonadas en las calles, es muy triste”, concluyó.