UN DÍA DISTINTO

Ducoté y el gabinete, en un retiro espiritual antes de los cambios

Fue ayer, en una quinta de La Lonja perteneciente a una orden religiosa. Hubo coaching, charlas y juegos grupales. Participaron también los funcionarios que ya tienen un pie afuera.

Por Redacción Pilar a Diario 25 de noviembre de 2017 - 00:00

Un predio arbolado de tres hectáreas, sembrado de imágenes religiosas, fue el escenario elegido por el intendente Nicolás Ducoté para compartir un retiro espiritual con todos sus funcionarios. El último, antes de los cambios en el gabinete.
No hubo sacos y corbatas para los hombres ni polleras y tacos para las mujeres. La consigna fue ropa cómoda, apta para actividades al aire libre. Y mucha disposición para escuchar.
El lugar elegido fue la quinta San Agustín, en la calle El  Palenque al 1800, de La Lonja. Una casa de retiros perteneciente a la conservadora orden religiosa de los Agustinos Recoletos. 
Además del enorme parque, la quinta cuenta con instalaciones de 1.800 m2, con capacidad para 196 personas. En general, es utilizada por comunidades religiosas, pero también se alquila a “grupos externos que requieren del servicio”, aclara el sitio web oficial.
Según pudo reconstruir El Diario a partir del testimonio de distintos funcionarios, el eje central de la jornada fue la dinámica de grupo y la disposición a mejorar en el trabajo. Para algunos, sin embargo, la arenga llegó demasiado tarde: varios de los participantes ya saben que tienen las horas contadas en el gobierno.
El de ayer no fue el primer retiro de este tipo que realizó el gobierno. Varios señalan que es habitual que el jefe de Gabinete, Juan pablo Martignone, cite a reuniones descontracturadas, con dosis de coaching. Algo similar a las que suelen hacer el presidente Mauricio Macri y la gobernadora María Eugenia Vidal con sus funcionarios. Pero por lo general, los encuentros locales duran una mañana, pero el de ayer se prolongó durante toda la jornada de trabajo.
Estuvieron todos. Desde Ducoté y Martignone, encargados de las primeras charlas por la mañana, hasta el último de los directores. Incluso, un participante contó que también participó “gente sin cargos en el gabinete, pero con roles importantes” en el gobierno. No dio nombres. 
Además de Ducoté y Martignone, las actividades estuvieron coordinadas por otros dos coach, responsables de los trabajos y juegos más específicos. 
No se filtraron registros fotográficos del encuentro y los testimonios se dieron a cuentagotas. De hecho, la mayoría de los participantes entró al predio sin sus teléfonos celulares.
Fue un día distendido, fuera de la rutina habitual. Una especie de aperitivo de un trago más amargo que llegará para muchos dentro de pocos días, cuando Ducoté revele, finalmente, los cambios en el gabinete que, anticipó, será más chico. 

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