Automovilismo artesanal

En tiempos de híper profesionalización, Federico Lynn apuesta a la vieja escuela. Desde el taller familiar de Pilar prepara el Ford con el que competirá en el TC Pista.

20 de enero de 2016 - 00:00

En tiempos de híper profesionalización, Federico Lynn podría inaugurar la categoría de piloto vintage. Lejos de los talleres que parecen laboratorios, los ingenieros y el personal de marketing, alrededor del piloto pilarense todavía se respira la esencia del viejo automovilismo, uno más artesanal que el actual. 

La ilusión de Lynn se gesta en un solo lugar: el taller, la empresa familiar, en el kilómetro 52,5 de la ruta 8. Los apellidos más icónicos del automovilismo pilarense se forjaron sobre esta ruta (Oyhanart, Lynn, Perlo, entro otros). Y allí se construye el Falcon modelo 2016 de Federico. Su padre, Osvaldo, se encarga del armado de los motores. No hay trabajo tercerizado. La imagen rememora a las viejas épocas del TC, pero también infiere otro nivel de competitividad. 
Pese a ello, Lynn buscará capitalizar el envión que tomó a fines del año pasado y anunció que apunta a clasificarse al playoff del TC Pista. “Seguimos con equipo propio, haciendo un gran esfuerzo desde lo económico y todo de manera artesanal. El motor y el auto se hacen en el taller de Pilar. No contamos con ingeniero de pista, pero la base sigue siendo la misma y esperamos dar pelea para clasificar a la Copa”, contó, en una charla con El Diario.
El pilarense remarcó que “la segunda mitad de 2015 fue mucho mejor que la primera”. “Al principio pagamos un alto costo por haber estado un año sin correr. Sin los recursos de los equipos de punta, con presupuesto acotado y sin pruebas. Estuvimos muy limitados”, reconoció y se reprochó los incidentes que lo afectaron en las primeras fechas: “Perdimos muchos puntos por toques. Nos pegamos mucho. La segunda etapa pudimos acomodarnos y terminamos mejor, así que esperamos seguir por ese camino para este año”.
La última temporada Lynn celebró haber podido completar el calendario, obtuvo un 15º como mejor resultado (Paraná) y quedó 26º en el campeonato. Ahora renueva las expectativas a raíz de una serie de cambios en el Ford. “Estuvimos corriendo con un auto nuevo, pero con varias deficiencias que corregimos para este año, como el techo que estaba muy alto. Así que se cortó, se reformó todo. Se modificó el techo y se achicó la cola, dos puntos que no pudimos tocar durante el año porque implicaban mucho dinero”, comentó a El Diario y enfatizó que “el objetivo será tener continuidad para estar entre los 15”. “Para este año el objetivo será completar todas las carreras, aunque será difícil porque los costos subieron muchísimo. Igual vamos con muchas expectativas y la esperanza de funcionar bien porque mejoramos mucho los motores”, añadió Lynn.
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