Solo dos personas en una misma habitación. Una de las dos muere por un golpe que le da la otra con una herramienta. El victimario insiste que todo ocurrió en el marco de una pelea. Eso es lo que deberá demostrar José Verryt, acusado de asesinar a Ariel Muzzolón, compañero de trabajo en la tradicional empresa pilarense Zorzi.
En diálogo con El Diario, Carlos Cassette, abogado de Verryt, afirma que su cliente mantuvo una pelea con la víctima, aunque reconoce que es inminente el pedido de prisión preventiva por parte del fiscal.
Precisamente, para el fiscal Gonzalo Acosta se trató de un homicidio agravado con alevosía. Sin embargo, la defensa no ha pedido aún la excarcelación: “No es oportuno hacer peticiones. Por el momento sigue detenido en la comisaría, pero si le dan prisión preventiva será trasladado a un penal. Es un hecho para debatirlo en juicio oral y público”.
El hecho se produjo poco después de las 18 del lunes 15, en la plegadora ubicada sobre la ruta 25 y la calle Pirovano, a la altura del barrio San Alejo. “Con esta calificación actual, la excarcelación común no cuaja, debería ser extraordinaria, esa es la realidad”, indicó el abogado.
Misterio
Por lo pronto, aún no se conocen los resultados de la autopsia realizada al cuerpo de Muzzolón (que tenía 29 años). Según su familia, Verryt (42) le habría dado un golpe artero y por la espalda con una llave francesa, mientras hablaba con su hermana por Whatsapp.
“Por un lado está la existencia de la pelea, que es lo que afirma nuestro cliente; por el otro el rumor de la calle, que dice que fue en forma alevosa y traicionera. Todo es motivo de pruebas: testigos del hecho, no hay”.
Hasta el momento, “Verryt confesó ser el autor del hecho, pero se discute la forma: la única forma de dilucidar si hubo o no pelea es en un juicio, y que los jueces con su convicción determinen qué pasó en ese galpón”.
En este sentido, Cassette reafirmó que el detenido “tiene vestigios de enfrentamiento, rasguños, y ha sido debidamente documentado”.
Por otra parte, el abogado indicó que su defendido “salió ‘ciego’ del lugar, él toma conciencia al rato que está en un auto (el de Muzzolón), llama a la hija, recuerda que se peleó. Pero no entiende por qué está en el auto del muchacho fallecido, fue como un click emocional. Ni siquiera sabía que la otra persona estaba muerta”.
Cassette comentó que “a lo sumo, hubo un exceso de la legítima defensa”. Y agregó: “Mide alrededor de 1,50m; la víctima era mucho más grande físicamente”.
Y, ante el posible pedido de prisión preventiva: “Habrá que esperar para ver si puede esperar o no el juicio en libertad, todavía no es el momento”.
“Verryt tiene vestigios de enfrentamiento, rasguños, y ha sido debidamente documentado”.
CARLOS CASSETTE.
El dato
La familia de la víctima afirma que Verryt le habría dado un golpe artero y por la espalda, mientras hablaba con su hermana por Whatsapp.