Un delincuente asaltó una estación de servicio de Del Viso donde mantuvo como rehenes a siete personas. Finalmente, al verse rodeado por la policía, decidió entregarse y fue en ese momento que se descubrió que estaba utilizando una réplica de una pistola 9 milímetros. El ladrón fue detenido, mientras que ninguno de los rehenes resultó herido.
Fuentes policiales aseguraron que el hecho sucedió pasadas las 3 de la mañana de ayer en la YPF de Panamericana y ruta 26. Empuñando un arma de fuego, el ladrón ingresó de forma sorpresiva y violenta al sector del bar. Amenazando a la empleada de 25 años que se encontraba en la caja, obligó a arrojarse al piso a los seis clientes que se encontraban en el lugar.
De repente, por la parte trasera del salón, apareció otra de las empleadas que al ver la situación salió rápidamente sin ser vista y se comunicó con el 911.
Cinco minutos después, cuando el delincuente aún estaba adentro y se disponía a robarle las pertenencias a los clientes, llegaron al lugar efectivos del CPC y de las comisarías 4ª y 7ª. Los uniformados rodearon el lugar no dándole la posibilidad de escapar.
A partir de ese momento y ya con el predio totalmente rodeado, comenzó un intercambio de palabras entre los jefes policiales y el delincuente a fin de llegar a buen término. Pero en primer lugar, el individuo no quiso aceptar la posibilidad de entregarse, lo que motivó unos instantes de nerviosismo entre las víctimas que continuaban siendo amenazadas.
Luego de más de una hora, los interlocutores policiales lograron convencer al atrincherado, consiguiendo que se entregara pacíficamente, arrojando el arma empleada y liberando a los rehenes, que resultaron todos ilesos.
Ya con los testigos, se procedió a requisar la mochila del individuo encontrándose con la suma de 280 pesos en efectivo y secuestrándose el arma de fuego empleada, resultando ser una réplica de pistola 9 mm.
El ladrón es un conocido delincuente de la zona de apenas 19 años, domiciliado en la esquina de Los Olivos y Anasagasti de Manuel Alberti. Ya cuenta con importantísimos antecedentes policiales por robos calificados en la misma zona y aledaños.
La causa fue caratulada como “aprehensión por robo calificado en grado de tentativa y privación ilegal de la libertad”. Recayó en la UFI Nº 3 de Pilar a cargo de Gonzalo Acosta.