Derqui/Monterrey volvió a vestirse de campeón. Venía atravesando un mal momento deportivo. Entre semana había vuelto a ganar ante Náutico San Pedro, pero le falta demostrar que estaba para medirse con los candidatos del Torneo Oficial de
Derqui/Monterrey volvió a vestirse de campeón. Venía atravesando un mal momento deportivo. Entre semana había vuelto a ganar ante Náutico San Pedro, pero le falta demostrar que estaba para medirse con los candidatos del Torneo Oficial de
Vino Defensores Unidos, con solo una derrota en 2013 y pagó los platos rotos. El orgullo herido de los campeones lo devastó.
Derqui completó los 37 minutos que quedaban del juego suspendido por corte de luz con una paliza memorable. El duelo arrancó 7-5 para los derquinos por lo que había pasado un mes antes. Y ese primer cuarto fue implacable.
Los dirigidos por Javier Prodan recuperaron a Patricio Tabarez, pero además sacaron su mejor juego. Defensa concentrada, con rebotes asegurados y la artillería de siempre.
Luis Díaz encabezó el salvaje castigo (7 triples en la noche) de un parcial de 25-2, que sumado al tanteador original dio 32-7 en el cierre del primer acto.
Con esa tremenda ventaja, el camino a la victoria estaba abierto. Además, en la noche del viernes no aparecieron los baches. Nunca hubo desconcentración, ni bajaron el pie del acelerador.
Entonces, más allá que CADU en algunos pasajes mejoraba, la diferencia nunca se redujo de las 20 unidades.
Además, con la derrota de Sportivo Escobar ante Ciudad de Campana, todavía tiene chances de luchar por el 1 de la general en los playoffs. Y esta tarde, a las 19.30, lo buscará en Pilar ante Atlético.
El equipo