El juicio por el crimen de Rosana Galliano fue suspendido ayer hasta que el viudo José Arce se recupere del ACV hemorrágico que sufrió hace dos semanas en plena audiencia, informaron fuentes judiciales.
La decisión fue adoptada por el Tribunal Oral en lo Criminal (TOC) 1 de Campana luego que los informes médicos indicaron que Arce (64) se encuentra internado con “pronóstico reservado”.
En tanto, la madre del imputado, Elsa Aguilar (83), denunció a los jueces Daniel Rópolo, Elena Bárcena y Raquel Slotolow por el delito de “abandono de persona”.
La denuncia fue formulada por la mujer ante el fiscal de Delitos Complejos de Zárate, Juan José Montani, luego que Arce sufriera hace dos semanas un ACV hemorrágico en plena audiencia y por el que continúa internado en terapia intensiva.
El abogado defensor del viudo, Alfredo García Kalb, dijo a Télam que la acusación abarca también al médico perito que “no lo quiso atender”.
Sin recusación
En tanto, la Cámara de Apelaciones y Garantías rechazó el planteo de recusación de los jueces por parte de la defensa, por lo que ahora apelarán ante Casación.
“Pedimos la recusación porque cuando Arce se empezó a sentir mal, el presidente del Tribunal (Rópolo) hizo que lo saquen de la sala para que continúe la audiencia”, relató García Kalb, y agregó que “en vez de pedir una ambulancia rápido pidió la asistencia del médico de la Asesoría Pericial de Tribunales”.
Tanto para el abogado como para su codefensor, el abogado Roberto Hermo, el tiempo “que tardó Arce en llegar al hospital” y en recibir tratamiento “contribuyó a empeorar su estado”.
“Esta situación nos hace dudar de su imparcialidad”, finalizó el abogado, en referencia a los jueces del TOC 1.
Además de Arce, en este debate están siendo juzgados su madre, acusada como su hijo de ser instigadores del homicidio; el supuesto autor de los disparos, Gabriel Leguizamón (41) y su hermano, Paulo Leguizamón (35).
El crimen de Rosana Galliano (29) fue cometido la noche del 16 de enero de 2008, en su casaquinta del barrio El Remanso, cuando la víctima cenaba con su hermana Mónica.
Rosana recibió a las 22.50 un llamado de Arce a su teléfono celular y, por tener poca señal, se vio obligada a salir de la casa, donde la ejecutaron de cuatro balazos con una pistola.
El dato
Desde el inicio de la causa, el entonces fiscal Marcelo Pernici consideró que se trató de un crimen por encargo de Arce, con quien la víctima atravesaba un conflictivo proceso de divorcio, financiado por su madre y ejecutado por los Leguizamón.