“Si dependemos de tres comisarías lo lógico sería que tengamos seguridad, pero la realidad es todo lo contrario”, dijo una de las víctima de un asalto en el barrio Las Lilas, de Presidente Derqui.
De acuerdo a los frentistas reunidos con El Diario, la zona está sufriendo todo tipo de delitos “desde hace años, pero ahora más que antes porque se drogan para robar y hacen cualquiera cosa”.
El barrio está sobre la ruta 234 hacia Derqui. Limita con su par La Alborada y su referencia clave es el único semáforo entre el Hospital Austral y el acceso a la ciudad. Es paradójico, porque depende de tres seccionales de policía.
Cabe recordar que ayer El Diario dio a conocer la situación que atraviesan vecinos del centro de Derqui que llevan registrados “40 robos en 20 días”. A su vez acusan a la Justicia de liberar rápidamente a los delincuentes y reclaman un “cambio de actitud de jueces y fiscales”.
Testimonios
“Si a uno lo asaltan sobre la parada de micros en dirección a Derqui, tiene que denunciar en la Comisaría 2ª, pero si lo asaltan en la parada de enfrente, o sea cruzando la ruta, hay que ir al destacamento Monterrey, y si lo roban desde Benito Lynch hacia ruta 8, o sea apenas 100 metros más allá, se debe ir a la Comisaría 5ª”, dijo una de las mujeres reunidas.
Se trata de la misma frentistas que hace 15 días trasladó de urgencia a un centro médico a su empleada doméstica porque cuando llegaba a su casa, dos motochorros le arrebataron su cartera y al caer se sacó el hombro.
Ese tipo de delito, -el de motochorros-, se repite unas dos veces por semana. Luego están los “clásicos” asaltos de bandas armadas en viviendas particulares: “a mí me entraron hace dos meses, al vecino de acá a la vuelta hace 40 días y a mi cuñado hace 12”, dijo otro de los hombres que, por temor a represalias, optó por no dar su nombre. Es que para ellos hay dos bandas en la jurisdicción de Presidente Derqui, y otras que vienen a robar desde otras localidades.
De acuerdo a sus propias estadísticas los vecinos aseguran que entre La Alborada y Las Lilas hay un asalto por semana a casas. “Vivimos rogando que no nos toque a nosotros cuando salimos a la mañana o llegamos a la tarde-noche del trabajo”.
Luego están los “asaltos al paso”: al menos una persona es despojada cada 48 horas por ladrones en moto sobre las paradas del barrio en la ruta 234. Finalmente galopa impunemente el flagelo de la droga en toda la zona y hasta en cercanías de la Escuela Nº 37, de Benito Lynch y Las Camelias.
“Los que venden están a unos 100 metros del colegio y esperan la salida de los alumnos para ofrecerle falopa a los más grandes de 12 o 13 años, cualquiera ve eso”, aseguró otra mujer.
Dónde, qué y cuándo
La creciente suma de delitos obligó a una urgente reunión de varios vecinos de Las Lilas con el presidente del Foro de Seguridad Vecinal de Derqui, Eduardo Curti, el titular de la Comisaría 2ª, subcomisario Jorge Lescano, su par del destacamento Monterrey, Sergio Bonín, y el comisario de la 5ª, Roberto Andrada.
El encuentro se llevó a cabo en la sociedad de fomento y se prolongó por más de dos horas. “Escuchamos lo consabido, que no hay patrulleros suficientes ni efectivos, pero si dependemos de tres seccionales, que se organicen y vean cómo prevenir los robos”, sostuvo uno de los vecinos.
Pese a la ya crónica deficiencia policial por falta de móviles y hombres, tanto Curti como los tres jefes policiales coincidieron en asegurrar que rondan con mayor periodicidad el barrio. Según admiten, desde entonces se ve a un patrullero circulando “al menos una vez al día”.
Las críticas al Municipio tampoco faltaron en el encuentro: “del SAP (Servicio de Apoyo Policial) Municipal no vino nadie, y jamás vemos un móvil de ellos vigilando nuestro barrio; tampoco se colocó la cámara de seguridad que se iba a poner en Benito Lynch y Las Camelias”.
El momento más álgido de la reunión se produjo cuando la esposa de un policía en actividad fue directa con los jefes policiales porque no dudó en señalar, “acá se sabe bien dónde se vende, qué se vende y quién la compra, y ustedes también lo saben”.
El silencio se cortaba con un cuchillo hasta que prontamente Curti prometió contactarse con la brigada de Narcotráfico de Pilar “para que urgentemente se haga un trabajo de campo en el barrio”.
La frase
“Acá se sabe bien dónde se vende, qué se vende y quién la compra, y ustedes también lo saben”. Una de las vecinas a la policía, durante la reunión del Foro de Seguridad.
Amenazas en Facebook
No pasaron 48 horas de la reunión de los vecinos de Las Lilas con el Foro de Seguridad y la policía para que en Facebook aparecieran amenazas contra los que denunciaron robos, asaltos, venta y consumo de drogas en el barrio.
Si bien se apuntó a varios vecinos, el centro de los agravios fue la sociedad de fomento. “Escriben que somos buchones, que ‘todo está arreglado con la gorra’ que no sirvió de nada la reunión y que no molestemos más porque sino ‘van a perder mal”, dijo un matrimonio sobre lo escrito en esa red social.
“Pero no les tenemos miedo, ya sabemos quiénes son y dónde están, ahora es cuestión de que la policía haga algo”, aseguró por último la pareja.