Desiderio Soriano murió tras ser atacado brutalmente por delincuentes.
Los dos detenidos por el crimen de Desiderio Soriano el anciano que fue brutalmente golpeado para robarle 80 pesos quedaron en libertad horas después de haber sido detenidos.
Según contó uno de los hijos de la víctima, Germán Soriano, desde la Fiscalía le dijeron que los apresados fueron entregados a sus padres porque ambos “son menores de edad”.
El propio familiar remarcó el malestar que genera entre los suyos el seguir conviviendo diariamente en la calle con quienes, asegura, “provocaron la muerte de mi padre”.
“La fiscal de menores (Paula Romeo) me dijo que van a ver si el entorno de estos delincuentes le puede dar contención o si no los enviarían a un correccional de menores, pero mientras yo los veo todos los días”, disparó Soriano.
En tanto, con mucha impotencia, el hijo del anciano que falleció a causa de un derrame cerebral producto de la golpiza recibida, señaló: “a mi papá no me lo van a devolver, pero no quiero que haya impunidad y que le pase lo mismo a otra persona”.
El hombre, explicó que el próximo paso de la Justicia, sería buscar testigos oculares del hecho, ya que a pesar de las pruebas recolectadas y de que se realizaron allanamientos y detenciones, la causa sigue como en un principio.
“Yo así no puedo seguir más, estoy descuidando mi trabajo y tengo angustia e impotencia, a mi papá lo asesinaron y no voy a descansar hasta que se haga justicia”.
Los procedimientos se llevaron a cabo hace una semana, uno de los cuatro lugares allanados fue el bar “Los Gurisitos”, ubicado sobre la calle Musladini, del barrio Buide, de donde salieron, tanto Desiderio como Jorge Basualdo, otra víctima que sufrió el mismo final y por causas muy similares, en febrero último.
Tras el operativo, el local fue clausurado por inspectores municipales y aún sus puertas se mantienen cerradas.
Respuestas
Otro frente de batalla de la familia Soriano, según ellos, es saber por qué en el Hospital Sanguinetti, su papá quedó en una camilla en la guardia durante varias horas inconsciente.
“Son varios los puntos que indican que a mi papá lo dejaron sin atención, como si fuese un borrachito que llegó de la calle y no como una víctima de un ataque a golpes”, aseguró Soriano.
“Me asesoré con médicos y enfermeros con los papeles que me entregaron en el hospital y me dijeron que no habría recibido la atención que necesitaba”, señaló el hijo de la víctima.
En las primeras horas del 5 septiembre último, el anciano salió del bar, rumbo a su casa por la calle Cañonera Tortuga. A poco más de cien metros de llegar a las vías del ferrocarril General Urquiza, lo interceptaron y lo golpearon brutalmente para quitarle los 80 pesos que tenía y un anillo de oro.
El hombre, fue trasladado al nosocomio céntrico, donde falleció un día después a raíz de un derrame cerebral.
