La policía logró detener a un hombre que blandiendo un chuchillo de grandes dimensiones, amenazaba con matar a toda su familia. Los efectivos policiales lo aprehendieron frente a su domicilio de la localidad de Presidente Derqui y le secuestraron el arma empleada.
Fuentes de la repartición aseguraron que el hecho sucedió cerca de las 22.30 del domingo último cuando a través de un llamado telefónico recibido en el destacamento policial de Monterrey, se daba cuenta que un hombre amenazaba de muerte a su propia familia.
Efectivos de esa dependencia llegaron rápidamente a una vivienda ubicada en la intersección de las calles Bolivia y Gutiérrez, interiorizándose de lo que estaba aconteciendo. En la entrada principal se hallaba un hombre con una gran cuchilla tipo “machete” profiriendo gritos hacia el interior del inmueble.
Preguntado sobre el motivo de tal actitud, no supo qué contestar, ni mucho menos justificar la tenencia del arma blanca en su mano. En ese momento su cónyuge, de 28 años, salió del interior de la casa haciendo conocer a los efectivos policiales lo que estaba sucediendo.
Lo real es que en esa propiedad se encontraba viviendo ella en compañía de sus dos hijos de 8 y 10 años. El hombre -se supo después que era su marido- de nacionalidad paraguaya de 30 años, la estaba amenazando con matarlos a los tres, es más, minutos antes de la llegada de los efectivos, el marido había ingresado a la propiedad y tomando del cuello a la más pequeña de las hijas de ambos, apoyándole el filoso cuchillo en la garganta los volvió a amenazar a todos, manifestándole que correrían la misma suerte.
De inmediato el sujeto fue detenido, aunque en primera instancia se resistió e intentó apuñalar a uno de los policías pero sin lograr su objetivo. Se le secuestró la cuchilla de cocina de unos 20 centímetros de hoja, con la que amenazaba a su familia.
Pudo saberse luego que si bien la pareja convivía, las agresiones y amenazas contra la mujer y sus hijos eran casi cotidianas, que ya habían ocurrido en otras oportunidades.
Además se supo que desde hace meses la mujer había regresado de Paraguay, convencida por el marido para restablecer el matrimonio, prometiéndole que las cosas cambiarían definitivamente para bien, cosa que no ocurrió. El detenido quedó a disposición de la Unidad Funcional de Instrucción Nº 4 de Pilar a cargo de Federico Mercader.