El padre de la docente asesinada, duro con la política

"Pretenden ganar las elecciones con un país lleno de gente que mata por nada". Y dijo: "la Argentina será la segunda Colombia". Piden acelerar el juicio oral a los detenidos.

22 de agosto de 2010 - 00:00

 

Los vecinos renovaron su pedido de justicia y sus críticas a la política.

 

 

En la noche del viernes se realizó una nueva marcha en reclamo de justicia por el crimen de la docente Sandra Almirón, asesinada cuando intentaron robarle el automóvil el 25 noviembre último en el barrio La Alborada, de Presidente Derqui.

Unas 200 personas llegaron hasta la Comisaría 5ª de la localidad, ubicada sobre el kilómetro 50 de la ruta 8.

Allí está alojado el delincuente acusado de ser el autor material del crimen.

En caravana, los manifestantes salieron desde la estación de trenes del ferrocarril San Martín de la localidad y marcharon hasta la comisaría, ubicada a unos 4 kilómetros de distancia.

En el lugar, el padre de la víctima Rubén Almirón, apuntó a la clase política, llamando a los vecinos a “recapacitar a la hora de votar, hagamos algo por la seguridad y la de nuestra familia”, lanzó y se preguntó: “el año que viene habrá elecciones ¿pretenden ganar con el país lleno de gente que nos mata por nada?”.

El hombre disparó: “para mí justicia es que los asesinos de mi hija se pudran en la cárcel” y remarcó: “pido a los jueces que bajen la imputabilidad de los menores que matan y les pido a los funcionarios que hagan algo, no quiero pensar que son todos uno mediocres, no tienen ningún proyecto”.

El padre de Sandra siguió descargando su bronca e impotencia por la situación y lanzó: “le digo a la señora presidenta Cristina Fernández, que también es cómplice de lo que pasa en la Argentina todo los días, que nos están matando por nada” y a modo de advertencia disparó: “si seguimos así, vamos a ser que la Argentina se convierta en una segunda Colombia, no le importa nada a nadie”.

Para cerrar su discurso Almirón prometió: “yo ya no tengo a mi hija, pero voy a seguir luchando por justicia por Sandra y seguridad por Derqui”.

Antes de que Rubén tome el micrófono, Héctor, uno de los hermanos de la víctima, abrió el acto señalando: “hoy estamos realizando la marcha número 20 y todavía no hay condena para los asesinos”.

Al mismo tiempo, el hermano de la víctima lanzó: “estamos en el lugar donde está preso el asesino de mi hermana, ya tendría que estar condenado y en una cárcel” y agregó: “que no nos sorprenda que la justicia lo deje libre”.

Para recordar el martirio por el que pasa su familia desde el crimen de Sandra, Héctor contó: “en 15 días bautizo a mi hija y no tiene madrina, porque este asesino que está acá dentro, la dejo sin madrina”.

Para terminar el acto, habló el esposo de Sandra, Walter García, quien pidió que la gente siga participando de las marchas: “hoy me tocó a mi y mañana le puede tocar alguno de ustedes”, al mismo tiempo y en línea con su suegro y su cuñado reclamó que los funcionarios de turno se comprometan y que los jueces apuren las condenas de los asesinos de su esposa.

La marcha numero 21, el próximo 3 de Septiembre a las 20, en el mismo lugar, frente a la Comisaría 5ª del cruce de Derqui.

 

 

Murió víctima de una pelea
En la noche del viernes murió un ciudadano peruano de 44 años domiciliado en Villa Rosa que hace 20 días había protagonizado una pelea vecinal en la que recibió tres puñaladas en el tórax.

La víctima, identificada como Aníbal Alvaro Yauri Chuco, estaba internada en el Hospital Juan Cirilo Sanguinetti en estado delicado. El hombre fue intervenido quirúrgicamente unas tres veces debido a la gravedad de las heridas recibidas.

Todo comenzó cuando tras una discusión de Yauri Chuco con un vecino intervinieron familiares de uno y otro lado y se desató una batalla campal.

Allí fue que tomaron protagonismo las armas blancas y la familia de la víctima fue atacada a cuchilladas. Como resultado de la sangrienta disputa, los cinco integrantes de la familia peruana llegaron hasta el Centro de Salud local para atenderse de diferentes heridas.

El hombre de 44 años recibió tres heridas en el hemotórax derecho y fue intervenido quirúrgicamente en dos oportunidades, cortes que el viernes le provocaron la muerte.

La causa pasó de “lesiones en riña” a “homicidio” y quedó imputado el hombre de 48 años que se encuentra prófugo de la Justicia.

 

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