Roban dos casas en un country, una de ellas de la hija de Zúccaro

En el momento del hecho no había nadie. Se llevaron unos 5.000 dólares de una caja fuerte y varias joyas. Ninguna abertura fue forzada. De la otra casa sustrajeron algunos objetos de valor.

26 de febrero de 2010 - 00:00

En el barrio Santa Silvina, sobre ruta 25, ya ocurrieron otros hechos delictivos. 

 

Nuevamente robaron en un barrio privado de Pilar en horas de la noche del miércoles último. Sin embargo, este no fue un hecho delictivo más porque en esta oportunidad las víctimas fueron los propietarios de dos viviendas, una de ellas perteneciente a la pareja integrada por el basquetbolista derquino Nicolás Tabarez y Jazmín, la hija  del intendente municipal, Humberto Zúccaro.

Según informaron fuentes oficiales, el delito se perpetró cuando en la finca del lote 73 no estaban sus moradores y hasta el cierre de la presente edición, en la tarea asumida por la Subdelegación de Investigaciones de Pilar (DDI), no había pistas firmes que llevaran a los ladrones.

Pese al total hermetismo policial, este medio pudo saber que el hurto principal fue cometido en la caja fuerte de la casa y que a resultas los malvivientes se habrían hecho de unos 5.000 dólares, joyas y otros artículos de valor.

Todo sugiere que contaban con precisa información porque, a diferencia de otros delitos similares, no se llevaron de la morada ningún electrodoméstico y, exclusivamente, se remitieron a la caja de seguridad.

Mientras que en la segunda casa los ladrones entraron y robaron algunos objetos de valor.

Se sabe que el robo tuvo lugar en horas de la tarde-noche porque Tabarez retornó a su casa del barrio Santa Silvina, ubicado en inmediaciones de la ruta 25 y calle Anchorena, cerca de las 21.30.

Fue entonces que tuvo el amargo descubrimiento porque al ingresar a la dependencia donde está la caja fuerte vio que estaba abierta y completamente vacía. Pero el delito no terminó allí porque luego también robaron la casi totalidad de las joyas y relojes pertenecientes a Jazmín, mujer de Tabarez e hija de Zúccaro.

Luego de ver lo ocurrido en su morada la víctima inmediatamente se entrevistó con el personal privado de seguridad del country para saber si alguno había visto algo extraño. Sin embargo, su esperanza se frustró cuando le respondieron que ignoraban por completo lo sucedido dentro de su casa. Y esto pese a que deben cumplir con programadas rondas de vigilancia por todos los lotes. 

 

Informe preciso

La primera teoría surgida del seno de la investigación sostiene que los malhechores contaban con cierta información. Eso se desprende de un dato clave: sabían que la llave de la caja fuerte estaba entremezclada con otras en un llavero, generalmente, colgado en la cocina. Saber eso les evitó cualquier pérdida de tiempo en lo que significa violentar una caja metálica de seguridad. Después hay otro hecho muy llamativo, porque ninguna puerta o ventana estuvo forzada o con sus cerraduras rotas para poder ingresar. Y eso demostraría dos cosas: que los delincuentes tenían un duplicado de alguna puerta, o sabían que la familia se había retirado sin cerrar con llave; algo más difícil esto último. Luego también sabían acerca de la total ausencia de moradores y, muy probablemente, a qué hora retornaban. Ya realizada la denuncia policial varios uniformados de la Comisaría 1ª de Pilar llegaron hasta el lugar del hecho junto a peritos de la Policía Científica con el objetivo de encontrar rastros o huellas de los autores del robo. Y acá también hubo dos cosas que profundizan el enigma, porque luego de revisar minuciosamente el alto alambrado perimetral no encontraron ningún boquete por el que pudieran ingresar y escapar; y más tarde los guardias privados de la entrada y salida del country señalaron no haber registrado a personas desconocidas.

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