1. La primera. El 13 de mayo de 1997. El caos. Los saqueos del 2001. 3. La primicia. Caso García Belsunce. 4. Primera tapa a color.
El Diario Regional de Pilar cumple hoy 4.000 ediciones; 4.000 diarios que son 4.000 días. No es poco. Sobre todo en estos tiempos de velocidad, de comunicación virtual, tiempo sin tiempo y sobre todo en un escenario como es la ciudad de Pilar, donde pareciera que el perdurar es mérito de pocos.
Desde aquel martes 13 de mayo de 1997, cuando el por entonces llamado El Nuevo Diario apareció en los kioscos, mucho ha ocurrido en Pilar, y tímidamente nos fuimos abriendo un espacio. Hemos sido testigos y parte de esos acontecimientos, siempre comunicando el día a día y sobre todo respetando nuestro medio, a nuestros lectores y a nuestras convicciones.
Desde el número cero, la intención de todos aquellos que formaron parte de El Diario fue hacer un producto de calidad que se diferenciara del resto, que evolucionara y se fuese adaptando a las nuevas posibilidades tecnológicas, comprendiendo e interpretando la realidad de la comunidad de la que formamos parte.
Rápidamente se aplacaron las dudas acerca de si se justificaba editar en Pilar un diario que apareciera todos los días: en el Partido pasaron y pasan cosas. Además, la segunda mitad de los ’90 trajo aparejados numerosos cambios que impulsaron el crecimiento de la zona hasta niveles insospechados: llegaron la autopista, los shoppings, los cines, proliferaron los clubes de campo, el fútbol de AFA, centros de salud de primera generación... Sin descuidar el crecimiento demográfico, que junto a todo lo antes mencionado posicionó a Pilar de manera definitiva.
En semejante contexto, ese pueblo que ahora era ciudad necesitaba la llegada de un medio de comunicación con ideas frescas, que diera testimonio y al mismo tiempo acompañara ese desarrollo con hechos, no sólo contando hechos sino también generándolos.
Sin embargo, un proyecto con esas ambiciones no podía prosperar sin el apoyo de los lectores, aquellos vecinos que rápidamente asimilaron la salida de El Diario y lo hicieron propio, lo nutrieron y lo cimentaron a través de diferentes vías. Una de ellas es, sin dudas, la publicación de los avisos clasificados solidarios: gracias al aporte de los lectores, miles de alimentos no perecederos son entregados cada mes en diversas entidades del distrito.
Sucede que, desde un principio, el compromiso con la comunidad fue prioritario. Cómo olvidar cuando, en 2002 –un momento de plena crisis en el país- un maratón solidario de 48 horas organizado por FM Plaza (un aliado fundamental de El Diario) recaudó 11 toneladas de alimentos.
De la misma manera, la cultura y el deporte fueron desde siempre pilares cruciales del contenido del medio: los artistas encontraron un lugar de expresión y la gente del deporte revivió sus hazañas, sus victorias y sus derrotas desde las páginas de El Diario, donde sea que hubieren competido. Asimismo, desde febrero de 2002 el suplemento La Liga llenó los martes de la más completa información deportiva.
A través de los años, el diseño, la tipografía, las producciones fotográficas y la calidad de impresión fue creciendo en calidad, hasta arribar a fines de 2006, cuando llegó el color, que desde ese momento acompaña cada edición de los domingos.
El Diario fue protagonista a la hora de dar primicias, como cuando difundió a través de sus páginas el crimen de María Marta García Belsunce. Pero, además, supo diferenciarse cuando la información era compartida: luego de tan largo camino recorrido, al abrir El Diario el lector sabe que va a encontrar “algo más”.
Pasaron 4 mil números. Casi trece años, próximos a ser cumplidos. El boom de mediados de los ’90 y principios del siglo XXI han dejado al distrito en una posición de privilegio. Pilar es uno de los municipios más importantes de la provincia y tiene en El Diario Regional a un medio de comunicación que cada día trabaja para estar a la altura de las circunstancias.
Formado por un equipo de profesionales (la mayoría permanece desde los primeros días) hemos logrado consolidar el mismo ideal con el que comenzó este viaje: hacer un diario para todos los pilarenses.
La Local, 1a revista de información general.
Soy Mano, uno de los tres libros editados por El Diario.
Primera entrega de los Premios La Liga al deporte.
Libros, cds y eventos
Una usina generadora de ideas
Desde el momento de su aparición, una característica acompaña a El Diario Regional de Pilar: el medio nunca se quedó en el mero hecho de difundir la información de todos los días. Más allá del papel, El Diario fue generador y parte de todo un concepto cultural, social y deportivo que dio como resultado diversos productos.
Su compromiso con la cultura tiene bases firmes, de allí el apoyo y la organización de festivales de teatro, música y exposiciones, ya sea en Pilar centro, las localidades o la galería Ars Duo. Donde hay cultura, allí intenta estar El Diario.
Así, a lo largo de los años se ha generado buena cantidad de productos culturales, entre ellos nada menos que un disco (“Hecho en casa”, editado en 2007 y protagonizado por artistas locales) y tres libros (“Soy mano”, “La guerra de Juan” y “Los irresponsables”). Además, la vereda del medio ha sido escenario de la Feria del Libro Usado, mediante la cual los vecinos pudieron vender, comprar y canjear material, en un evento que con el correr de las ediciones fue incorporando números artísticos.
De las páginas de El Diario nació la revista La Local, un producto editorial de calidad que abundó en datos históricos y fotografías que nunca se habían visto en los medios locales. Sus informes fueron elaborados con una rigurosidad hasta ahora no repetida en revistas de la zona.
Algo similar ocurre con los suplementos: no menos de tres veces al año, El Diario sorprende con la elaboración de un suplemento que varía en su temática pero no claudica en sus parámetros de calidad: así, se han hecho desde análisis estadísticos hasta recopilaciones fotográficas con la historia del distrito, siempre contando con la pluma de colaboradores de prestigio. Sin olvidar al suplemento La Pancha, que durante mucho tiempo abordó la realidad de una manera fresca y descontracturada.
El deporte tampoco ha quedado afuera de la usina generadora de ideas, a partir de la organización de eventos y contiendas que marcaron una huella. Un buen ejemplo fueron Los Premios La Liga, especie de Olimpia local que galardonó a los deportistas que se destacaron entre los años 2002 y 2006; y el maratón con el que el medio celebró sus diez años de vida, en mayo de 2007.
Convertido en mucho más que un periódico de papel, El Diario se ha dedicado a plasmar ideas.