Pilar Joven

Mickael, un Acosta con nombre propio

Mickael Acosta (26) es el hijo mayor del ex jugador de fútbol “Beto” Acosta. Pero no se dejó avasallar por ser “el hijo de” y, con esfuerzo y perseverancia, pudo hacer su propio camino.

Por Redacción Pilar a Diario 7 de febrero de 2017 - 16:12

Profesor de Educación Física y Director Técnico de un equipo de fútbol "intercountries” Micka – como le dicen sus más íntimos- supo desempeñarse en el fútbol profesional, representando al club Fénix.

 

En el Pilar Joven de esta semana, nos cuenta cómo es crecer bajo el ala de un personaje tan reconocido y de qué manera pudo desligarse del peso de su apellido para mostrar todo su talento.

 

¿Cómo es tu relación con el fútbol?

El fútbol es mi vida. Desde que nací y aún hasta el día de hoy, en mi casa se respira fútbol.  Y no sólo por mi papá, tanto mis dos hermanas como yo, amamos este deporte. Ellos son todos de San Lorenzo y yo soy de River, así que lo que se vive cuando estos dos equipos se enfrentan es jodido, jaja. Empezamos con las chicanas una semana antes del partido y seguimos durante y después de cada encuentro.

 

Teniendo en cuenta que jugaste al fútbol de manera profesional, ¿cómo fue para vos crecer con un futbolista tan reconocido?

Para mí fue una bendición que mi papá juegue al fútbol, porque así pude conocer las mejores canchas, estar con grandes jugadores, ir a las prácticas y viajar por el Mundo acompañándolo. Pero una vez que me empecé a dedicar a lo mismo que él, comencé a sentir una presión un poco más grande, sentía que tenía que mejorar o al menos igualar lo que había hecho él. Fue un proceso muy difícil. Siempre quise sacarme la mochila de "ser el hijo de” y ser simplemente "Micka Acosta”. Pero en el ambiente futbolístico las comparaciones son inevitables.

Haber dejado de jugar fue un golpe enorme, todavía estoy haciendo el "duelo” pero, de a poco, lo voy superando.

 

¿Qué significó para vos haber podido compartir una cancha con él?

Fue algo hermoso y único y no sólo para mí sino también para toda mi familia. Igual, más allá del disfrute, adentro de la cancha era un compañero más. A mi entender, los compañeros de un equipo, del deporte que sea, tenemos que ser como hermanos. Acá él dejaba de ser mi papá para ser mi "hermano”, siempre defendiendo los colores de la camiseta y tirando para el mismo lado.

 

¿Cómo te encuentra tu presente profesional?

Hoy estoy dirigiendo al equipo de Haras del Pilar, la categoría "Maxi”. Jugamos el torneo "intercountries” de Zona Norte y la verdad es que estoy muy agradecido a este grupo de hombres por darme la oportunidad de demostrar lo poco que sé y, aparte, por su predisposición en cada entrenamiento y partido. Entrenamos dos veces por semana y siempre vienen con la mejor onda después de su jornada laboral y por más de que estén "grandes”, disfrutan de sentirse jugadores profesionales por un par de horas. No por nada ganamos 10 títulos seguidos.  Además coordino el gimnasio del country  Ayres y sigo buscando nuevos rumbos para desarrollar mi carrera.

 

¿Cuál fue el mejor consejo que te dio tu papá?, ya sea personal  como profesional

El mejor consejo que me dio fue que disfrute todo lo que haga, que no deje pasar las oportunidades que se me presenten, aunque siempre pensándolo bien y siendo responsable de mis actos, y que nunca me dé por vencido, que crea que estoy a la altura de las circunstancias para poder superar cualquier reto que se me cruce.

 


 

 

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