Estar sin suministro eléctrico puede llegar a complicar bastante la vida diaria, sobre todo si el termómetro acaricia los 35 grados de temperatura. Familias de Manzanares llevaban hasta anoche casi 40 horas sin luz y la respuesta por parte de Edenor, se hace rogar.
Paula, una de las damnificadas, habló con El Diario y explicó: “Nos quedamos sin luz ayer a las 7 de la mañana, me cansé de llamar a Edenor y me dicen que están trabajando pero por acá no pasó ninguna cuadrilla”.
El problema, reconocen los mismos vecinos, serían las ardillas que muerden los fusibles de los transformadores. De hecho, en una oportunidad, llegaron a estar hasta 8 días sin luz; “cuando se acercó la cuadrilla de Edenor el problema se solucionó en 10 minutos”, aseguró la mujer.
Tal es su desesperación por volver a tener electricidad, sobre todo para poder cargar el tanque de agua, que el miércoles vio a un grupo de empleados de la empresa dando vueltas por el barrio y se acercó corriendo a pedirles una explicación. “Muy amablemente me dijeron que ellos no podían solucionar eso, que estaban ahí porque tenían que cambiar un medidor, cosa que tampoco pudieron hacer porque, claro, no había luz”.
Las horas pasan y, con ello, la paciencia se acorta. Tal y como Paula hay otras familias que se encuentran afectadas e inmersas en la incertidumbre de no saber cuándo les devolverán el servicio: “nosotros en casa somos dos adultos jóvenes y, aunque no nos gusta, nos la podemos bancar, pero hay familias con chicos chicos o adultos mayores y en esos casos es todavía un problema mayor no tener luz”.
En uno de los tantos llamados que la vecina de Manzanares realizó, una de las razones que esgrimieron fue que “hay localidades que tienen más usuarios sin luz, así que van a tomar como prioridad a ellos”.
Ahora solo les queda esperar que atiendan sus reclamos o, en su defecto, que baje la temperatura. Habrá que ver qué ocurre primero.